A partir de las 0 horas de mañana, Shell aplicará un nuevo aumento en sus combustibles: subirá 2,09% promedio en todo el país. La empresa argumentó que el incremento responde a la suba de los precios internacionales del petróleo que hubo durante enero.

A lo largo de 2018 los precios de los combustibles crecieron en promedio un 69,88%, con un mínimo de 64,21% para la nafta súper y un máximo de 76,27% para el diésel, según informó la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos (Cecha).

La entidad señaló que el gasoil subió 74,29% y la nafta premium 65,77%, en un escenario de mercado caracterizado por la política de desregulación o liberación de precios adoptada por el gobierno nacional a fines del año anterior, "medida largamente esperada por el sector de los hidrocarburos", y la evolución de la economía hacia un escenario de recesión y crisis.

"Ambos factores incidieron sobre la demanda, cuyo comportamiento a lo largo del año refleja el impacto que recibió el consumidor", destacó Cecha.

Diciembre cerró con una caída promedio en términos interanuales de la demanda de combustibles de 5,17%, una baja menor que la de noviembre, que había alcanzado al 8,26%.

En términos anuales, Cecha destacó una caída en la demanda general de combustibles durante el año pasado del 0,63%. "Si bien en el comparativo anual el consumo de combustibles registra valores similares, los datos muestran que este se fue retrayendo progresivamente a lo largo del año", destacó el informe.

El estudio agregó que "si bien la decisión oficial de liberar precios se implementó a partir de octubre de 2017, los efectos de su aplicación comenzaron a sentirse en el mercado ya iniciado el 2018".

"El retraso de precios en surtidor que venía arrastrando el sector se agregaron las sucesivas devaluaciones del peso, a partir del segundo trimestre, y un escenario de suba del precio internacional del crudo que llegó a variaciones del 25% hacia el cuarto trimestre", señaló el estudio, que recordó también que durante 2018 se registraron 14 aumentos de precios y 2 bajas.

Según Cecha, ese escenario de aumentos marcó la caída de la demanda, que también se vio afectada por el deterioro de la economía de bolsillo de los consumidores.