Laguna del Tesoro se convirtió ayer en la quinta propiedad que se suma al Parque Nacional Aconquija, mientras distintas organizaciones siguen reclamándole a la Legislatura que avale la ampliación de la jurisdicción ambiental para la incorporación de más tierras para la conservación de la flora y de la fauna autóctona.
La cesión se formalizó ayer durante un acto realizado en el Ente Tucumán Turismo, con la presencia de su vicepresidenta Elena Colombres Garmendia, del vicepresidente de la Administración de Parques Nacionales, Emiliano Ezcurra, de la representante de la Fundación Wyss (donó U$S 22 millones para la adquisición de las tierras), Ana Lis Flores, de la apoderada de la Fundación Flora y Fauna Argentina, Laura Fernández, y del impulso de la iniciativa del parque, el ex diputado Miguel Camel Nacul.
Mediante la ley 27.451, promulgada el 22 de agosto pasado, se creó el Parque Nacional Aconquija. Se trata de un territorio de 70.000 hectáreas con tres nuevas áreas núcleo en el faldeo del Aconquija: dos ampliando significativamente hacia el sur el actual Parque Nacional Campo de los Alisos, que pasará a ser un portal operativo; y un área núcleo en el norte del gran Parque Nacional proyectado, representada por la Quebrada del Pueblo Diaguita.
Nacul señaló a LA GACETA que con el dinero de la Fundación Wyss se adquirió ya unas 7.000 hectáreas en Jaya; otras 11.000 en Cochuna; 6.000 en Piedra Labrada; 3.000 en El Churqui y ahora las 6.500 en la Laguna del Tesoro.
Además de la adquisición de las tierras para la ampliación del Parque Nacional Aconquija, las organizaciones intervinientes están trabajando en el programa para la reintroducción del tapir o anta, el mamífero característico del ecosistema de las Yungas, extinguido en nuestra provincia, remarcó Nacul.
Los objetivos
Para poder cumplir el objetivo de conservar el 30% del planeta en estado natural para 2030, la Campaña Wyss para la Naturaleza, la que donó los U$S 22 millones para que Tucumán cuente con el Parque Nacional Aconquija, implementará cuatro estrategias principales:
• Apoyar proyectos locales de conservación en el terreno. La Campaña Wyss para la Naturaleza ofrecerá apoyo económico para las organizaciones que trabajen con comunidades indígenas, líderes locales y una amplia gama de actores para establecer, expandir o mejorar la gestión de parques y de áreas protegidas. Nature Conservancy, Aves Argentinas, Fundación Flora y Fauna Argentina, Gonarezhou Conservation Trust y Fundatia Conservation Carpathia se encuentran entre las organizaciones que recibirán más de U$S 48 millones para compromisos de financiación en la primera ronda de proyectos de conservación. En conjunto, estos proyectos ayudarán a proteger casi 4 millones de hectáreas de tierra y 17.000 kilómetros cuadrados de áreas de océano ecológicamente ricas en 13 países.
• Aumentar los objetivos de conservación internacional. Apoyará las iniciativas para aumentar de manera significativa los objetivos globales para la protección terrestre y marina, que se actualizarán en la Conferencia de las Partes del Convenio sobre Diversidad Biológica que se llevará a cabo en China en 2020.
• Inspirar acción. La Fundación Wyss se está asociando con National Geographic para generar más conciencia acerca de la crisis de conservación global. Esa iniciativa inspirará a ciudadanos, legisladores y otras organizaciones filantrópicas a ayudar a acelerar la protección de las tierras, aguas y vida silvestre del planeta a través de inversiones en la conservación de la naturaleza.
• Usar la ciencia para maximizar los logros de la conservación: la Fundación Wyss está apoyando un proyecto piloto a través de la Universidad de Berna para apoyar el análisis científico práctico a fin de garantizar que se estudien, compartan e implementen a escala global las estrategias de conservación de la tierra eficaces, innovadoras y beneficiosas económicamente.