Ante el Congreso brasilero, Jair Bolsonaro prestó juramento y asumió la presidencia de la República Federativa de Brasil por los próximos cuatro años.
"Prometo mantener, defender y cumplir la Constitución brasileña. Observar las leyes, por el bien del pueblo brasileño", juró el nuevo gobernante, quien fue seguido por el nuevo vicepresidente Hamilton Mourao, general de la reserva del Ejército.
"Vamos a combatir la ideología de género conservando nuestros valores. Brasil volverá a ser un país libre de las ataduras ideológicas", expresó en su primer discurso frente a un parlamento repleto.
"Convoco a cada uno de los congresistas a ayudar en la tarea de libertad definitivamente al país del yugo de la corrupción, de la violencia, de la sumisión ideológica", invitó el presidente.
Bolsonaro, también aseguró que durante su gestión habrá una "oportunidad única de rescatar al país de las amarras ideológicas" y para "combatir la ideología de género"n dejando ver su arraigada afinidad con la ultraderecha.
"Vamos a unir al pueblo, a darle valor a las familias, a respetar las religiones y las tradiciones judeo-cristianas", señaló en un discurso que duró diez minutos. "Brasil por encima de todo y Dios por encima de todo", sentenció.