El "santo" cerró el 2018 con un ascenso a la Superliga y una histórica victoria en el Monumental. Galería de imágenes.
PARA TODA LA VIDA. En una remontada histórica, San Martín levantó un 0-2 ante Atlético en el Monumental y se llevó el primer clásico tucumano en la Superliga. ARCHIVO LA GACETA / FOTO DE FRANCO VERA
La temporada 2018 quedará en el recuerdo de todos los hinchas de San Martín. Después de una década, el "santo" abrochó su cuarto ascenso a Primera y lo cerró con una histórica victoria en el clásico tucumano, nada menos que en el Monumental. Aunque el próximo año tendrá la difícil misión de mantener la categoría ¿Quién le quita lo bailado a los "cirujas"?
El domingo 4 de febrero, Claudio Bieler selló la victoria de San Martín ante Los Andes en La Ciudadela, en el debut de Rubén Forestello como entrenador del equipo. Un inicio con escasos buenos resultados facilitó la salida de Diego Cagna, el director técnico que dos temporadas antes había logrado la hazaña de sacar al "santo" del Federal A y de mantenerlo en la B Nacional.
El cambio en la conducción del equipo y la cinta de capitán le dieron a Bieler otra dimensión. Empezó a pagar con goles hasta completar el año con 16.
La victorias comenzaron a llegar y San Martín trepó en la tabla hasta llegar a la última fecha con chances de ser campeón. Después de una conmovedora caravana que movilizó a miles de hinchas por toda la ciudad, una dura derrota ante Brown en Adrogué obligó a transitar el camino más largo. Pero el sueño seguía intacto.
Emulando al mítico gol de Iván Agudiak (ante Guaraní Antonio Franco), Juan Galeano provocó un terremoto en La Ciudadela la lluviosa noche del 6 de mayo. El 3-3 ante Villa Dálmine depositó a San Martín en semifinales del reducido, pero con un envión anímico que iba a ser difícil de frenar.
En fila, despachó a Agropecuario y a Sarmiento, al que goleó por 5-1 para concretar, el 3 de junio, el ascenso a la Superliga.
Las primeras 15 fechas en la máxima categoría fueron difíciles para el "santo", que demoró ocho en alcanzar su primera victoria. Fue ante Racing, con 10 hombres y después de arrancar abajo por 0-1. En el banco de suplentes ya estaba sentado Walter Coyette, que llegó para torcer el rumbo de un equipo que no encontró su mejor funcionamiento con Forestello.
Sin brillar, San Martín comenzó a sumar aunque nunca logró salir de los puestos de descenso. Una nueva victoria ante San Martín de San Juan, una catastrófica caída ante Independiente, y una remontada inolvidable ante Patronato, en Paraná, demostraban que al nuevo entrenador le quedaba mucho trabajo por hacer.
En el calendario la fecha 14 estaba marcada en rojo. El primer clásico tucumano en Primera se debía jugar nada menos que en el Monumental. Con las tribunas repletas y la fiesta preparada para celebrar la llegada de Atlético a la punta, la ventaja de dos goles pareció sepultar las ilusiones de San Martín. Pero en 75 minutos que quedarán en la historia, Lucas Acevedo, Luciano Pons y Alberto "Tino" Costa lograron una remontada que los fanáticos "cirujas" jamás olvidarán.
Pasados de festejos, el 0-3 ante Newell's lo estancó, otra vez, en la zona roja de los promedios. Pero eso, después de 1 de diciembre, parece importar poco y nada.
Por delante, Coyette y sus jugadores tendrán 10 fechas para conseguir lo que ningún plantel "santo" logró hasta ahora: mantenerse en Primera. Si se miran los próximos rivales, la misión parece difícil, pero los hinchas prefieren aferrarse a un nuevo milagro, como esos que marcaron el rumbo de un 2018 para recordar toda la vida.