Seguramente a ningún fanático futbolero le interesa saber si Luka Modric baila bien el Lindjo, una danza popular de Croacia. Basta y sobra con que la rompa jugando para su país o su equipo, Real Madrid. Por eso el presentador de la última ceremonia del Balón de Oro, el DJ Martin Solveig, no se lo preguntó y en cambio lo felicitó por haber obtenido el galardón que desde hacía 10 años sólo quedaba en manos de Lionel Messi o Cristiano Ronaldo.
Pero el análisis del DJ no fue el mismo cuando en el escenario recibió a Ada Hegerberg, la primera fubtbolista ganadora del Balón de Oro en su disciplina. Y eso que tenía detalles de sobra para destacar, porque se trata de un reconocimiento inédito para una premiación que nació en 1956, y absolutamente merecido por tremendo curriculum de esta jugadora noruega de 23 años, que milita en Lyon de Francia.
Modric se quedó con el Balón de Oro y Messi fue quinto“¿Sabés hacer twerking”?, fue la primera pregunta de Solveig a la deportista que en ese mismo momento estaba haciendo historia, pero ni así zafó del comentario sexista. ¿A quién le importa? Al DJ ni se le cruzó por la cabeza hacer esa consulta al recibir a Modric, pero al recibirla a ella sí. Y eso es machismo.
Ada tuvo que tomar aire y, sin ni una gracia, respondió con un categórico “No”, como para que no te hagás ilusiones, DJ...
"Vemos que Ada Hegerberg se gana un merecido premio por su talento como futbolista. Es respetada por sus compañeros, hombres y mujeres en la ceremonia. Pero en ese momento, un hombre trata de disminuirla. Todos lo vimos", escribió en su cuenta de Twitter la periodista de la BBC, Sarah Mulkerrins.
Y claro que la situación causó indignación en las redes. Por eso a Solveig no le quedó otra que salir a disculparse. “Pido perdón, fue una broma probablemente mala”, dijo, intentando levemente tomar conciencia de lo básico y primitivo que se mostró como encargado de una ceremonia con importancia mundial.
En la rueda de prensa posterior a la premiación, Ada no se quedó callada y habló de lo que importa, de todo eso que la llevó a ser la primera mujer en conseguir un galardón siempre reluciente en manos de varones.
“No se detengan”, les dijo la futbolista a las millones de colegas que tiene alrededor del mundo. "Es muy importante que se haya creado una categoría para las mujeres en el Balón de Oro, por eso quiero acabar con un mensaje a todas las jóvenes: crean en ustedes, no paren nunca", pidió la delantera.
Abrazando el balón de oro que tanto merecía, les dedicó el premio a todas sus compañeras de equipo: “sin ellas todo esto no habría sido posible. Gracias a mi club".
El esfuerzo que le permitió inaugurar un galardón
Hegerber ganó con su equipo, Lyon, el título de la liga francesa y la Champions League Femenina, por tercera vez consecutiva.
Según un informe en la BBC, la noruega fue la máxima goleadora de la liga con 15 anotaciones, llegando así a 157 goles en su carrera profesional a nivel de clubes. También recibió los premios a mejor futbolista del año por la BBC y mejor futbolista europea por la UEFA.
Su "bio"
Hegerberg nació en Molde, Noruega, en el año 1995. Como los mejores futbolistas del mundo, a sus primeros pasos los dio con una pelota atada al pie. Por esa razón debutó a los 15 años en el equipo de Kolbotn.
Apenas dos años después ya participaba de la principal liga femenina de su país, donde fue elegida como la mejor jugadora joven y una de las máximas goleadoras de su categoría.
Todo esto le abrió las puertas a la selección de Noruega de mayores. Tenía apenas 18 años.
Uno de los clubes más prestigiosos al respecto del fútbol femenino como es Lyon puso los ojos en ella y desde que la sumó a sus filas el equipo logró seis títulos locales y tres Champions. ¿A quién le importa si sabe perrear?