LONDRES, Inglaterra.- Ante el intento de algunos diputados conservadores de derribarla, la primera ministra Theresa May advirtió ayer que un cambio de líder no facilitaría las negociaciones para la salida del Reino Unido de la Unión Europea, el denominado “Brexit”.

Tampoco cambiaría el equilibrio de fuerzas en el Parlamento, señaló May. “Los próximos siete días son decisivos”, alertó en una entrevista con el canal Sky News.

May presentó la semana pasada el preacuerdo con la UE, por el que recibió severas críticas, también desde su partido y de su gobierno, en el que dimitieron varios ministros.

Un sector de su grupo parlamentario conservador quiere una moción en su contra, pero aún no está claro si ya tienen suficientes peticiones como para celebrar la votación.

Graham Brady, presidente del comité que recibe esas peticiones, considera “muy probable” que May consiga superar la votación.

Si es rechazado, el Reino Unido podría abandonar el bloque de forma desordenada el 29 de marzo de 2019, con el riesgo de que se produzca una situación caótica.

Dominic Raab, quien esta semana renunció como ministro para el “Brexit”, atacó el acuerdo y acusó a May de haber llevado a cabo una negociación débil y de no haber amenazado de forma creíble con abandonar el bloque sin un pacto.

Raab describió el borrador de acuerdo como “el peor de todos los mundos” y dijo que algunas figuras en Bruselas mostraron un comportamiento “depredador”.

La cuestión más controvertida de las negociaciones fue la de evitar una frontera física irlandesa, pues la región británica de Irlanda del Norte quedará fuera del bloque mientras que la República de Irlanda permanece dentro. (DPA)