En las tribunas del “Mario Alberto Kempes”, más público que el que se estimaba (consecuencia directa de una promoción de entradas 2x1, de último momento). En la cancha, la Selección argentina mostrando pincelazos de sus individualidades, aunque sufriendo algún sofocón, más que nada en el primer tiempo. Anoche, en Córdoba, el equipo nacional que conduce Lionel Scaloni, superó por 2 a 0 a su par de México, con tantos de Ramiro Funes Mori al final del primer tiempo con un cabezazo y de Isaac Brizuela, en contra de su valla, en el complemento.
Antes de que Argentina se muestre más activo en ataque, fundamentalmente por el trabajo de Paulo Dybala y Lautaro Martínez, el arquero Agustín Marchesín tuvo un rol clave, al desbaratar dos intentos mexicanos. El gol de Funes Mori por centro de Dybala le dio algo de tranquilidad a la Selección para encarar el segundo tiempo. Mejoró en posesión de balón y opciones de ataque. Esta actitud trajo premio al final: un centro de Renzo Saravia dirigido a Mauro Icardi, fue interceptado por Brizuela, que vulneró su propio arco.
El martes, ambos volverán a enfrentarse desde las 21, en el “Malvinas Argentinas” de Mendoza.