En Liniers, la mayoría de los integrantes del plantel optaron por el silencio tras el paso en falso que San Martín dio frente a Vélez. La derrota, 1 a 0, preocupa tanto por el rendimiento individual y colectivo como por los puntos que el “Santo” sigue resignando en su regreso a Primera.

Del equipo que logró el ascenso, solo Matías García tuvo la disposición de hablar con la prensa en la zona mixta del José Amalfitani.

El “Caco” reconoció: “el sabor que nos deja este partidos es amargo. El resultado no es lo que esperábamos. Sobre todo en primer tiempo no estuvimos finos ni creamos juego. No tuvimos el nivel que mostramos frente a Boca”.

Por su parte, Adrián Arregui, ante la consulta sobre si creía que San Martín la “sacó barata” teniendo en cuenta que su rival estrelló tres disparos en los palos, respondió: “No sé si fue así, pero ellos fueron justos ganadores, en realidad nos superaron. En el segundo tiempo lo emparejamos un poco, pero para eso también tomamos riesgos. Podríamos haber perdido 2-0 o 3-0, como también empatarlo o ganarlo 2-1”.

La opinión de Nicolás Giménez fue coincidente. “Nos faltó el juego que tuvimos contra Boca. Perdimos la pelota, no la pudimos controlar en el medio y ellos tienen la virtud de que salen bien jugando y lo hacen con mucha intensidad”.

Emiliano Purita también expresó su punto de vista sobre las razones de la derrota. “No encontramos el orden. En algún momento Vélez nos desbordó. El gol se veía venir y lamentablemente después no pudimos darlo vuelta. Nuestro primer tiempo fue muy malo en todas las líneas, en general”.

El jugador cuyo pase pertenece a San Lorenzo, que jugó en la etapa inicial como lateral derecho y en el complemento pasó a la línea media, reveló qué le pidió el técnico Rubén Darío Forestello, al cambiarlo de posición. “Que presionara a los internos de ellos que estaban lanzando e intentara sacarles la pelota y atacar más rápido”.

El problema es que San Martín no arranca del todo en la Superliga. Al menos, no como sus hinchas imaginaban y deseaban. Arregui, con realismo, recordó de qué se trata: “Seguimos pensando en ganar y salvarnos del descenso. Ese es nuestro objetivo”.

FOTO DE MARÍA SILVIA GRANARA / ESPECIAL PARA LA GACETA
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