El porcentaje de acierto en el rubro de los disparos de media distancia a la carrera es uno de los más bajos del planeta fútbol. Varios factores tienen que conjugarse para que la pelota termine adentro y no en la tribuna, pero por fortuna para Atlético, Rodrigo Aliendro hizo exactamente lo que quería hacer: romperle el arco a Burian. “(Zielinski) me pedía que esperara un poco atrás, pero también hubo algo de intuición y suerte. Me voy contento porque habíamos hecho un buen partido y no merecíamos ir empatados en el primer tiempo. Fuimos justos ganadores”, aseguró el autor del 2-1, que le permitió al “Decano” quebrar una larga mala racha: desde febrero que no ganaba como local por la Superliga. “Era una deuda que teníamos, necesitábamos ganar en nuestra casa”, valoró el volante.
De todos modos, de poco hubiese servido el golazo de Aliendro sin el “atajadón” de Cristian Lucchetti sobre el final, cuando le tapó un cabezazo de pique al suelo a Ortiz. “Y...si sufrimos no vale, je. Pero el esfuerzo de los chicos es impresionante. Corren, meten, juegan...”, compartió méritos el capitán. “Son tres puntos muy importantes, porque necesitamos sumar en la Superliga. El promedio lo tenemos medio complicado, así que hay que sumar de local como sea”, cerró “Laucha”.