La llegada de Tomás Rojas pone fin a un mercado de pases tan complicado como surtido para Atlético. El primer refuerzo, allá por junio, fue Juan Ignacio Mercier, que debutó en Primera apenas tres años después del nacimiento de Tomás, un joven volante paraguayo que llegó ayer a la provincia y firmó su contrato con el club.
“Estoy muy contento. Es una experiencia muy linda para mí. Ojalá pueda ayudarle al equipo a conseguir grandes cosas y que sigamos creciendo: el club y yo”, le dijo Tomás a LG Deportiva, minutos después de comer su primera empanada tucumana. “Pedí de pollo”, confiesa.
No sólo será una experiencia gastronómica y futbolística para él: es que después de jugar un par de años en Sol de América, en Paraguay, vivirá por primera vez fuera de su país.
“El fútbol argentino es muy competitivo y hace unos años vengo siguiendo a Atlético. Me gusta su manera de jugar y por suerte se dio esta posibilidad”, confiesa.
Rojas vio la epopeya del equipo en Quito, durante su primera participación en la Copa Libertadores y comenzó ahí su interés por Atlético. Claro, no se trata de un fanatismo, pero ciertamente le interesó la mística que mostró en ese momento y sigue mostrando ahora.
“Me llamó la atención la cantidad de gente que meten todos los partidos y la garra que ponen”, avisa. El lunes por la noche estaba viajando hacia Buenos Aires desde Asunción, mientras se jugaba el primer tiempo del partido de sus nuevos compañeros contra Racing, pero eso no evitó que su interés por el “Decano” se perturbara.
“Aterricé y vi el segundo tiempo. Por suerte el equipo pudo empatar y casi lo gana sobre el final”, relató.
En su llegada a Atlético, no tuvieron qué ver ni Enrique Meza Britez, ni Fabio Escobar, ni Fabio Ramos, ni Líder Mármol, algunos de los últimos paraguayos que jugaron en el “Decano”. Sí tuvo que ver Javier Toledo, el delantero que sigue recuperándose de su lesión en el talón de Aquiles.
“Fue compañero mío en Sol de América y esa fue mi referencia. Me habló muy bien del club”, explicó.
Pese a ser una de las promesas del fútbol paraguayo, el hincha de Atlético no lo conoce tanto como él a Atlético. Quizás por eso resulta interesante su propia definición, algo común en los futbolistas recién llegados y que no son “consagrados”.
“Soy un jugador hábil, veloz. Me desenvuelvo bien en el mano a mano. Creo que le puedo aportar muchas cosas al ataque de Atlético”, precisó.
Por lo pronto, luego de firmar el contrato por la tarde, Tomás descansó y hoy se entrenará por primera vez en el “Decano”.
En mente, tiene varias cosas, aunque en el partido del lunes se le haya escapado una de ellas. “Si por mí fuera, quiero jugar todos los partidos pero me encantaría enfrentar a los equipos grandes”, revela. Racing ya no se podrá ser, pero River, Boca, Independiente y San Lorenzo lo esperan.