CON TODA LA FUERZA
• A las 21.30 en el Teatro de la Paz (9 de Julio 162).
No hace mucho tiempo que Eruca Sativa se convirtió en una banda reconocida en la escena del rock, a pesar de haber cumplido una década sobre los escenarios.
La bisagra se produjo entre 2012 y 2013, le cuenta a LA GACETA durante una conversación telefónica el baterista Gabriel Pedernera. “Todo se dio de un modo natural, y no sentí una subida de escalón fuerte. Lo cierto es que a partir de esos años comenzamos a vivir de la música. Pudimos juntar el trabajo y el placer”, explica.
El power trío que conforman con Luisina Lula Bertoldi y Brenda Martín volverá a Tucumán esta noche, en el Teatro de la Paz, con Animal de Ciudad y Sipeganboys como teloneros. El grupo está posicionado ya como uno de los referentes del rock alternativo en el país, y transmiten una energía que hace honor a su formación, al tiempo que acumula nominaciones y premios en los Grammy y los Gardel.
“Somos polvo en el tiempo, la ceniza de un incendio”, se puede escuchar en el tema casi folclórico “Somos polvo”; así como cantan “Ver al revés, hace bien”, en el potente rock “Abrepuertas”. Prosa decididamente literaria.
- Son una de las bandas más elogiadas actualmente en el país.
- El crecimiento fue paulatino. Hace cinco o seis años, por ejemplo, dejé de dar clases. Fue cuando empezamos a ver los frutos de lo hecho y que la gente nos daba su apoyo. Pero aparte, tenemos muchos beneficios que son maravillosos: podemos crear con total libertad sin que nadie nos diga o nos imponga qué hacer o decir. Hacemos lo que nos gusta y lo que queremos hacer con lo que nos gusta.
- ¿Cómo componen?
- Tratamos de funcionar como una unidad... A veces uno trae una frase o una palabra y los otros dos la completan, pero intentamos que todo pase por los tres, porque todos somos compositores y nos gusta crear.
- ¿A qué le cantan?
- Cada canción tiene su propia historia y cada disco su propio concepto, pero siempre las temáticas parten desde un mismo lugar. Esta esa sensación de que la canción sea un poco agresiva porque vivimos la situación de lo cotidiano. Tocamos lo que nos nace, lo que nos sale naturalmente, hay como una declaración o una forma de interpretar. Pero bueno, espero que se interprete hacia el mismo lugar. Usamos en vivo sistemas digitales, es 100% digital, pero hay gente que tiene prejuicios todavía...
- Imagino que con dos mujeres en el trío sufrieron discriminación.
- Las hemos sufrido como todos en el país. Fuimos víctimas de cierta ignorancia: aún hoy en el rock se usan algunos términos que no son acertados. Hace poco un técnico dijo que mis compañeras “tocaban muy bien a pesar de ser mujeres”. Hoy no pasa inadvertido algo así. En el futuro vamos a ver qué arcaica fue una sociedad en la que una mujer cobra menos que el hombre por el mismo trabajo. No existe diferencia que toque uno u otro la batería o la guitarra. En esta parte del mundo se está abriendo una puerta muy importante: somos afortunados de poder vivir el momento de desasnar mentes. Espero que en el futuro tengamos la posibilidad de ser sorprendidos, que se juzgue por lo que estamos escuchando. Siempre fantaseo con el ambient, con una escucha libre de prejuicio.
- ¿Son independientes?
- Grabamos para un sello desde hace cinco o seis años, pero más para la distribución y colaboración: son aliados a nivel comercial, pero no interfieren nada en la parte creativa, que es 100% nuestra. Nosotros hacemos música sin restricciones.