El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, afirmó ayer que los cambios que impulsa el Gobierno cuentan con el aval del FMI, y que la volatilidad de los mercados “irá bajando” a medida que se avance con la venta de los US$ 7.500 millones que se destinarán a reforzar el Presupuesto, y el fortalecimiento del balance del Banco Central a través del reemplazo de las Lebac por Letras del Tesoro a “más largo plazo”. Ayer, a pesar de las palabras de Dujovne, el mercado del dólar continuó “caliente”, al punto que la divisa cerró en alza, a $ 28,84.
“Anoche estuve en comunicación permanente con las autoridades del Fondo. Hablé con la directora gerente, Christine Lagarde, y con otros funcionarios, con los cuales mantuvimos un excelente diálogo para ratificar que el programa no se altera”, dijo Dujovne. “Además, recibimos el apoyo del Fondo ante los cambios que estamos llevando adelante”, agregó Dujovne durante una conferencia de prensa en el Palacio de Hacienda.
El ministro también remarcó su alineamiento con las nuevas autoridades del Banco Central. “Estamos trabajando con el ahora nuevo presidente del BCRA, el ex ministro Luis Caputo, en un programa para ir fortaleciendo la hoja de balance del Central, reemplazando gradualmente las Lebac que tienen tasas muy altas y vencimientos de corto plazo por Letras del Tesoro de más largo plazo”, señaló.
Dujovne manifestó también su agradecimiento al ex Presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, por su labor de estos últimos dos años y medio. “Hace un mes y medio, cuando informé que estábamos buscando el apoyo del FMI, les dije también que atravesábamos un período de turbulencia financiera y que buscábamos su asistencia para mitigarla”, recordó el ministro. “Hemos conseguido un programa histórico de U$S 50.000 millones, complementado por U$S 6.500 millones de otros organismos internacionales”, indicó. En cuanto a la volatilidad en el mercado cambiario, dijo que eso lleva preocupación a la gente. “Queremos expresarles la tranquilidad de que estamos trabajando con el nuevo presidente del BCRA para normalizar el funcionamiento del mercado de cambios y suavizar los movimientos que hemos visto en los últimos días. Siempre en el marco de nuestro programa económico que se basa en la flotación de la moneda”.
Sobre la modalidad en materia cambiaria, sostuvo que “aún en un programa de flotación de la moneda, es posible tener un esquema cambiario con fluctuaciones suaves y pensamos que estamos en camino de poder llevarlo a la práctica”. Además, aclaró el destino que tendrán los U$S 15.000 millones que inicialmente desembolsará el FMI, que se repartirán por mitades para “apoyo presupuestario y fortalecimiento de las reservas del Banco Central”.
Si bien evitó manifestarse respecto de la proyección inflacionaria para este año -”es un tema del Banco Central”, dijo-, expresó su postura sobre el futuro de las Lebac. “El Central, por cuenta del Tesoro, va a comenzar un proceso paulatino, gradual y pronunciado de efectuar licitaciones de esas divisas para ser convertidas a pesos, y de esa manera financiar el componente de nuestro programa financiero, que debemos enfrentar en moneda local”, explicó.
Ayer, el dólar minorista subió 41 centavos y cerró en $ 27,74 para la compra y $ 28,84 para la venta, con lo que alcanzó un nuevo máximo tras acumular un avance de más del 11% a lo largo de la última semana. El interés en torno a la evolución del dólar se potenció tras la decisión tomada durante la víspera por el presidente Mauricio Macri de designar al ex ministro Caputo como nuevo titular del Central, en reemplazo de Sturzenegger. La suba del mercado minorista estuvo acorde con los vaivenes en el segmento mayorista, donde la divisa subió 45 centavos y cerró en $ 28,10. Con la salida de Sturzenegger de la conducción del Central, el mercado apostaba a que la entidad iba a intervenir en el mercado de cambios, pero eso no ocurrió. Analistas y operadores advirtieron que la cotización del dólar se podría mantener en alza en los próximos días, si el Central continúa sin intervenir. (Télam)