Para que no queden dudas sobre la inexistencia de segundas intenciones, en el Gobierno se refieren a “una campaña de concientización” acerca de los precios, sin medidas intervencionistas sobre el sector privado. Algo así como una cruzada para que los empresarios no inflen los precios innecesariamente ante el alza de costos. Sin embargo, y pese a cualquier tipo de aclaración, la flamante estrategia oficial genera resquemor en las cámaras empresarias, señaló una nota del sitio iProfesional.
El hecho de que Macri (aunque le genere sorpresa a más de uno) esté recurriendo a “prácticas kirchneristas” en su intento por calmar el ritmo inflacionario, trajo gran nerviosismo en el seno del “círculo rojo”. Y que esté dispuesto a pagar el costo político de esos resquemores es un síntoma elocuente sobre cuál es el objetivo número uno en esta etapa del programa económico: evitar, a como dé lugar, el contagio de la reciente devaluación a los precios de los bienes y servicios.
Desde el punto de vista técnico, el Banco Central ya advirtió que ese traslado es lo que más le preocupa. También, que mantendrá la tasa de interés bien alta todo el tiempo que sea necesario para evitarlo. “El Banco Central considera que debe mantenerse en niveles elevados para contener el traslado a precios”, afirma Federico Sturzenegger, ahora enfocado en los daños colaterales de la suba del dólar. La tasa de referencia acaba de ser confirmada en el 40% anual y todo apunta a que así seguirá por bastante tiempo. A partir de esto, el gremio de los economistas revisó a la baja sus pronósticos de crecimiento en 2018.
Desde un costado más político, ya hubo reacciones que permiten apreciar el giro de Cambiemos. El caso más llamativo -y que efectivamente produjo una revolución en el sector empresario- provino de María Eugenia Vidal. “Voy a mostrar a todos los empresarios que están aumentando los precios de los alimentos”, señaló enojada, al considerar que son injustificadas las remarcaciones en cualquier producto local que no tenga un componente dolarizado. “Quiero saber por qué están aumentando. Suben pese a que no tienen materiales importados”, dijo la gobernadora.