El gobernador, Juan Manzur, brindó una fuerte crítica a la política económica que lleva adelante el presidente, Mauricio Macri. El mandatario provincial aprovechó una pausa mientras se servía el tradicional chocolate por el acto oficial del 25 de Mayo para insistir en que no acompañará las políticas de ajuste sugeridas por la Nación, semanas después de que inicie la negociación con el Fondo Monetario Internacional por ayuda económica.

“Ya hay cosas que nos están haciendo mucho ruido, al peronismo le hace mucho ruido. No podemos seguir con una tasa de interés a más del 40%, ¿quién va a invertir? ¿Quién pondrá una máquina? ¿Quién va a agrandar un galpón? No podemos seguir con una inflación de piso del 25%, seguir tomando deuda”, cuestionó Manzur en rueda de prensa.

Tempranito

A pesar de que se había anunciado que se suspendería, tres carpas sobre 25 de Mayo ofrecían chocolate caliente y tortillas para el público, enmarcado en una plaza sin vallas, salvo las necesarias para asegurar los cortes del tránsito. Desde las 8.30, uno a uno fueron sumándose los funcionarios, ministros, legisladores, intendentes y concejales alineados al signo del gobierno provincial. El único opositor en la foto de familia en la escalinata fue el legislador radical Rubén Chebaia. Manzur y su vice, Osvaldo Jaldo, saludaron a los vecinos y dirigentes que se acercaron a tomar chocolate.

“Quiero agradecer por estar en la plaza, con todos los poderes del estado. Tiene una connotación especial porque en cada fiesta patria redoblamos el compromiso por un país mejor, aquí, en una plaza sin vallas”, dijo el gobernador en un primer contacto con la prensa.

En las escalinatas, el presidente de la bancada oficialista en la Cámara, Ramón Santiago Cano, charlaba con su par Silvia Rojkés, mientras tomaba del hombro al parlamentario Roque Cativa. Tres escalones más abajo, el diputado Pablo Yedlin charlaba con su hermano, el ministro de Desarrollo Social Gabriel Yedlin, quien se refregaba las manos porque el sol aún no calentaba el día. Sobre la vereda, la diputada Gladys Medina pidió una foto con Jaldo, antes de formarse para la foto de rigor. Algunos metros atrás, el legislador Marcelo Caponio bromeaba con la secretaria de Gobierno Carolina Vargas Aignasse.

“Tenemos una provincia sin déficit fiscal. Nosotros hemos acordado con el 100 por 100 de los representantes de los trabajadores, hemos logrado exportar bienes y servicios desde Tucumán por más de 1.000 millones de dólares, tenemos superávit en la balanza comercial. A pesar de que hay una ley de la Legislatura que nos ha otorgado la posibilidad de tomar deuda en caso de alguna eventualidad, este gobernador no ha tomado un sólo centavo de dólar de deuda externa”, continuó Manzur marcando diferencias con la gestión nacional. Y reiteró: “acá en Tucumán no voy a hacer el ajuste. Hay que cuidar a los grupos sociales más vulnerables. No seré el gobernador del ajuste”.

¿Qué opina de las restricciones al agro?, se le consultó. “No sé qué se hará, es una decisión de la política económica nacional. Primero dicen que bajarán las retenciones y ahora que no se sabe. No sé. El peronismo le dio todas las leyes que pidió el presidente Macri, pero son ellos los que define la política económica. Lo digo con la responsabilidad de que le voté todo y mire dónde llegamos. Hay cosas que ya nos empiezan a hacer ruido”, respondió.

Tras insistir en que no resignaría fondos por coparticipación, el gobernador se retiró. A los 10 minutos, con todo listo, Jaldo fue a buscarlo. El legislador Cano aprovechó los minutos de espera para romper la formación: salió a fumar un rubio al lado de los parlantes del acto. Manzur regresó con el bastón de mando y la banda, listo para continuar con el izamiento oficial, con las bandas militares y los abanderados de más de una veintena de escuelas.