El ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva llegó ya en avión a la sureña ciudad de Curitiba, en donde ingresará en la celda que le fue asignada tras ser expedido su pedido de prisión por el juez Sérgio Moro, según informaron los medios locales.
El ex presidente de 72 años se entregó durante la tarde (local) de hoy en la sede del Sindicato de los Metalúrgicos paulista, a donde se había recluido desde el jueves, cuando se emitió la orden de arresto.
La entrega estuvo precedida por un drama de más de dos horas, después de que decenas de seguidores del ex presidente bloquearan la salida del local del Sindicato de los Metalúrgicos donde estaba Lula en la periferia de Sao Paulo.
Varios sujetaron y tumbaron una valla para impedir que el auto del ex mandatario salga. Lula salió finalmente más de dos horas después en autos de la Policía.
Lula, que sigue siendo el político más popular de Brasil pese a su condena por corrupción, había dejado pasar el viernes un primer plazo para ingresar a prisión, después de que los tribunales rechazaran varios recursos de su defensa para suspender una orden de arresto.
La celda que cobijará a Lula se prepara desde hace dos meses
El político de 72 años anunció su decisión luego de participar de una misa en honor a su esposa fallecida. Después de informarlo, entró a almorzar con su familia en la sede del Sindicato de los Metalúrgicos, según reportó el diario "Folha de Sao Paulo".
Moro le había dado inicialmente a Lula plazo hasta la tarde del ayer para entregarse. Tras finalizar ese tiempo, fijado para las 17 (20 GMT) de ese día, en Brasil se esperó durante horas por la detención del ex mandatario (2003-2010) pero el candidato favorito para las elecciones de octubre arregló su entrega para el día de hoy.
"Lula no irá al matadero con la cabeza gacha", dijo su abogado
Lula permaneció en la sede del gremio de los Metalúrgicos de Sao Bernardo do Campo, lugar donde pasó la noche y del que solo salió para asistir a la misa de Marisa Letícia. Tras el oficio religioso, el ex presidente pronunció un aguerrido discurso ante sus seguidores, informó la agencia Dpa.
En su alocución, en la que terminó confirmando que se entregaría a la Policía, Lula se refirió varias veces al papel que los medios de comunicación y la Justicia jugaron en su proceso, acusándolos de estar detrás de su encarcelamiento.
"El sueño de consumo de ellos es la fotografía de Lula preso. Me imagino la excitación de 'Veja' y de 'Globo', colocando una foto conmigo preso. Van a tener orgasmos múltiples", se refirió el presidente respectivamente a una revista y a un grupo de medios de comunicación que considera contrarios a él.
Miles de personas apoyaron a Lula frente a la embajada de Brasil en Buenos Aires
Además, sobre Moro dijo: "no quiere a Lula de vuelta, porque, en su cabeza, los pobres no pueden tener derechos". Y agregó, en referencia a la Justicia brasileña: "el que quiera votar con base en la opinión pública, que largue la toga y se presente como candidato".
Luego de confirmar que cumpliría el mandato de prisión, Lula pidió a los manifestantes que continúen con su legado. "La muerte de un combatiente no parará la revolución", cerró.
Durante todo el discurso estuvo acompañado en el palco por su correligionaria Dilma Rousseff, del izquierdista Partido de los Trabajadores (PT) y destituida de la presidencia en 2016, así como de otros políticos. Entre ellos, se destacaban Manuela D'Avila, del Partido Comunista (PC), y Guilherme Boulos, del Partido Socialismo y Libertad (PSOL), ambos precandidatos presidenciales, a quienes el propio Lula describió como "la nueva generación". "Tienes futuro, hermano" le dijo incluso Lula a Boulos, de 35 años.
La caída de un mito de la izquierda latinoamericana
Lula fue condenado en enero en segunda instancia por cargos de corrupción en el marco del "Lava Jato", una megacausa que salpica a casi toda la clase política brasileña. La Justicia rechazó varios recursos de su defensa para evitar una orden de arresto, incluidos tres "habeas corpus" diferentes.
Pese a su inminente encarcelamiento, Lula continúa siendo precandidato del PT para las elecciones de octubre, y lidera las encuestas en todos los escenarios. Un tribunal electoral decidirá, presuntamente en agosto, sobre la viabilidad de su candidatura.