"Campaña en favor de la aceptación de la ropa arrugada", dice el mensaje que se está viralizando en Facebook para promover la idea de que tener las prendas planchadas forma parte de una construcción social y no de algo que se relaciona directamente con la higiene.
La publicación del usuario Javier Alonso ya fue compartida más de 276.000 veces y brega por la idea de que planchar es un desperdicio de tiempo y energía.
El usuario agregó al posteo que planchar tiene un costo energético de 1200W por hora y que afecta al medio ambiente. "No cuesta nada cambiar", dice la última frase de la publicación.
El valorar la ropa planchada es solo una construcción social. La ropa arrugada no es signo de nada, la ropa arrugada no es anti higiénica.