Se realizaron un total de 22 allanamientos en viviendas ubicadas en zonas consideradas de riesgo por la Justicia y la Policía. A partir de esos procedimientos, cuatro personas fueron detenidas y se secuestraron más de 40 celulares, más los chips de diferentes empresas telefónicas; cajas con cartuchos de armas de fuego de distintos calibres y partes de motocicletas.
La Fiscalía IX, a cargo de Washington Navarro Dávila, logró avanzar en la causa iniciada por los incidentes registrados en cortejos fúnebres, que incluyeron disparos y daños a vehículos particulares. Uno de los casos resonantes fue lo que ocurrió en los primeros días de marzo en San Martín y Camino de Sirga, en Yerba Buena.
“En esa oportunidad dispuse una investigación de oficio y di intervención al Departamento de Inteligencia Criminal de la Policía de la provincia, con el fin de identificar a las personas que portaron armas e hicieron disparos, ya que ponían en riesgo la integridad física de los peatones. El caso, además, es por portación y abuso de armas de fuego”, dijo ayer Navarro Dávila en una conferencia, que se realizó en la dependencia del departamento de Inteligencia policial, ubicada en avenida Sáenz Peña al 800, en la capital.
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Los allanamientos se realizaron en diferentes domicilios y los elementos secuestrados en los procedimientos fueron exhibidos en una larga mesa y en el suelo: desde armas y teléfonos celulares hasta partes de motovehículos, como un tanque, guardabarros, asientos o guiños, y artículos electrónicos.
“Las medidas se realizaron en áreas de mucho riesgo. Por ello, se tomaron precauciones y se requirió la intervención de equipos antimotines, el Grupo Cero e Infantería (de la fuerza de seguridad provincial)”, explicó el funcionario judicial, quien informó que los comisarios Fabián Salvatore y Hugo Cabezas estuvieron al frente del equipo que realizó el trabajo.
Las imágenes de los teléfonos móviles que se encontraron serán publicadas en la página web del Poder Judicial (PJ), en el área del Ministerio Público Fiscal (MPF), para que las personas que sufrieron algún hurto puedan ver los IMEI (identidad del equipo) y así puedan recuperar los aparatos.
“También se incautó un arma 9 milímetros, que habría sido utilizada por una persona en el sepelio del señor (Andrés) Ledesma, situación registrada en varias filmaciones”, añadió. El joven, de 18 años, había muerto tras recibir un disparo en la cabeza en la esquina de la avenida Coronel Suárez y Diego de Villarroel, en Villa 9 de Julio.
"Es preocupante que la población civil cargue con tantas armas", aseguró Navarro Dávila
El fiscal hizo hincapié en que, entre las personas detenidas, hay un policía retirado, quien quedó a disposición de la Justicia junto con su hijo. El joven habría efectuado disparos al aire tras el fallecimiento de Ledesma, de acuerdo a las declaraciones.
“Se iniciaron dos causas, a partir de la intervención de la Fiscalía IX, la que estoy subrogando. Ocurrieron distintos hechos, cuyo origen es el fallecimiento de personas que podrían haber estado vinculadas al ámbito delictivo. Estas situaciones generaron mucha preocupación en la población, debido a la forma en la que despidieron los cuerpos: disparos al aire y daños a vehículos”, ejemplificó.
El fiscal remarcó que se dispondrán nuevos procedimientos. “La investigación recién se inicia. Muchas personas participaron y realizaron disparos. Ya fueron identificadas otras personas”, indicó Navarro Dávila, quien no descartó la vinculación de todas las personas ubicadas con alguna organización delictiva que incurrió en motoarrebatos o la sustracción de celulares.