El gobierno de Estados Unidos diferirá la aplicación de aranceles al acero y aluminio para la Argentina y otros países con los que está negociando la posibilidad de exenciones definitivas, anunció ayer el representante de Comercio estadounidense, Robert Lighthizer.
“Creo que estamos en proceso de conversaciones ahora con Australia, Argentina y la Unión Europea, pero un gran número de países han preguntado por ello”, dijo Lighthizer ante el comité de Medios y Arbitrios de la Cámara de Representantes de EEUU, sobre la imposición de aranceles a las importaciones de estos productos.
“Otro país con el que se hablará próximamente sobre esto es Brasil”, sostuvo el funcionario ante el comité legislativo a cargo de la redacción de normas impositivas de la Cámara de los Representantes.
El presidente Donald Trump firmó a principios de marzo formalmente la imposición de aranceles de 25% a las importaciones de acero y de 10% para las de aluminio, de los que quedaron exentos por el momento México y Canadá, socios de Estados Unidos en el Nafta (Acuerdo de Libre Comercio de América del Norte, según sus siglas en inglés).
“Creo que los países saldrán (de la lista de incluidos en los gravámenes) conforme arribemos a un acuerdo y que algunos estarán en una posición en la que las tasas no se aplicarán sobre ellos en el curso de la negociación”, sostuvo el funcionario, que mencionó a Canadá y México aunque agregó que “habrán otros”. El gobierno de Trump y la Comisión Europea anunciaron que abrirán “inmediatamente” una discusión para alcanzar un acuerdo en materia de comercio exterior, incluyendo los aranceles sobre el acero y el aluminio.
“Hemos acordado lanzar inmediatamente un proceso de discusión con el presidente Trump y su administración sobre aspectos comerciales en común, incluidos el acero y el aluminio, con la vista en identificar resultados aceptables para las dos partes lo más rápido posible”, afirmaron los negociadores.(Télam)