›› REPORTE RURAL
Al parecer, todos los trabajos realizados entre el sector privado, los organismos de investigación y las autoridades fitosanitarias nacionales están dando sus frutos, ya que los preparativos para que la fruta fresca cítrica (limones) pueda arribar a Estados Unidos en los próximos días. Cualquier buena noticia es siempre bienvenida, sobre todo las de este tipo, ya que es el punto culminante de un esfuerzo conjunto largamente trabajado.
La decisión del gobierno de Estados Unidos de comprar citrus tucumano, luego de casi 17 años de restricción, hizo que el sector productivo y las autoridades provinciales y nacionales aunaran esfuerzos para lograr el objetivo buscado, trabajando codo a codo para lograr cumplir con todas las requisitorias que dispuso en su momento el Servicio de Inspección de Sanidad Animal y Vegetal del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA/Aphis, por sus siglas en inglés).
A lo largo de 10 años, la Aphis revisó con rigor las prácticas de producción y empaque de cítricos de Argentina y determinó que los limones podían ser importados con seguridad. Hoy, a días de iniciarse el proceso final para el envío de fruta fresca, se calcula que las exportaciones de nuestros limones no serían importantes, debido a que el sector citrícola quiere hacer las cosas bien e ir con mucho cuidado.
Lo cierto es que esto pasa a ser un gran hito por lograr la apertura de un mercado muy exigente, en cuestiones fitosanitarias y de calidad, lo que define la forma de trabajar que tiene la actividad citrícola de la región, y permite tener más posibilidades de acceso a nuevos mercados exigentes y de gran capacidad de compra, como lo son los asiáticos.
Haciendo historia, cabe recordar que la primera llegada del limón al país del Norte no fue fácil. Seis años duraron las negociaciones entre Argentina y EEUU; la apertura del mercado se concretó finalmente en 2000. No obstante, luego de las exportaciones de 2001, una decisión judicial suspendió el proceso. Los argumentos de los EEUU respondían a la intención de proteger la sanidad vegetal, a partir de la sospecha de que los limones argentinos podían ser transmisores de plagas y enfermedades. En 2000, el primer año en que exportamos limones a Estados Unidos, se enviaron 7.400 tn de fruta, mientras que en 2001 se pasó a 20.000 tn.
Lo que viene
Este logro significativo (de la reapertura del mercado estadounidense) es el resultado de un trabajo conjunto de varias áreas: la Estación Experimental Agrícola (Eeaoc), los ministerios de Producción local y Agroindustria nacional, la Cancillería, las cámaras del sector y la Embajada Argentina en Washington. Sin duda, fue determinante la considerable mejoría de las relaciones entre ambos países, materializada durante el actual gobierno.
El mercado de EEUU recibirá, de los empaques que están ultimando los detalles finales para cumplir con el plan de trabajo trazado por el Aphis, frutas con un rango de color entre el verde y verde amarillo, con el objeto de dar certeza de que la fruta fresca que está viajando hacia ese destino es fruta joven y nueva.
Ejemplos a seguir
Es más que importante decir que la Estación Experimental Obispo Colombres cumplió y cumple un rol de excelencia, ya que actúa como un Organismo Técnico que da una sustentabilidad a todo este proceso que se desarrolló durante muchos años de investigación y que se afianza con el envío de fruta que se logrará en estos días.
También es importante destacar el trabajo realizado por el Senasa, ya que con su labor no hubiera sido posible ingresar a ese país con todos los trabajos referidos a fiscalización y certificación que se debe cumplir para lograr llegar a EEUU.
Este trabajo en equipo debe servir de ejemplo para que los tucumanos, jujeños y salteños tomen como ejemplo a la hora de encarar otros proyectos beneficiosos para nuestra región.
Si lográramos trabajar coordinadamente, tras un objetivo común, para enfrentar los problemas crónicos que nos afectan, daríamos un paso significativo de madurez.
Como dijimos, y lo manifiestan de manera permanente los empresarios y dirigentes citrícolas, el reingreso de la fruta a EEUU es sumamente positivo porque permitirá abrir las puertas a otros mercados.
Este es un paso importantísimo, ya que se suma un nuevo mercado adonde van los ya conocidos limones tucumanos por su calidad y sanidad: la Unión Europea, Rusia, Filipinas, México, Brasil y otros mercados menores también importantes.
Lo cierto es que abrir el mercado a Estados Unidos generará, en los demás posibles mercados interesados en la fruta tucumana y regional, un plus de valor más que interesante.