La tarde se tiñó de sangre en San Cayetano. Un joven de 22 años fue asesinado a puñaladas en la esquina de Marina Alfaro y Fortunata García. El crimen ocurrió a las 19.30. El muerto es Juan Carlos Guzmán. Sería oriundo del barrio Alejandro Heredia, aunque tenía familiares en la zona donde fue ultimado.
Guzmán habría pasado la tarde ingiriendo bebidas alcohólicas junto con otras personas. Según las primeras averiguaciones policiales, en ese momento llegó un sujeto con el que mantenía una vieja enemistad.
Comenzaron a discutir hasta que el homicida sacó un cuchillo y le asestó dos puñaladas en el pecho. La víctima caminó unos metros buscando ayuda y cayó sin vida. Los investigadores informaron que ya tendrían identificado al homicida, aunque sus datos no trascendieron. La Policía ya se habría contactado a su familia para que se entregue. Esperan que se presente en las próximas horas en la División Homicidios o en Tribunales.
Los parientes del matador temen que la familia del joven asesinado intente vengarse. Desde la fuerza les garantizaron que les brindarán protección.
Los policías continuaban anoche realizando averiguaciones, mientras que miembros de la Infantería custodiaban el lugar para prevenir desmanes. A las 22, el cadáver seguía en el lugar. Personal de Medicina Legal realizaba los peritajes.
Barrio caliente
“Estaban ‘dados vuelta’ de alcohol y de drogas. Se encontraron en una esquina y se pusieron a pelear”, aseguró la vecina Estela Márquez. “Es impresionante cómo se drogan los chicos todo el día. Después terminan haciendo cualquier cosa. Este barrio está cada vez peor”, se lamentó.
“El chico caminó más o menos una cuadra porque quería llegar a la casa de su abuela... pero no llegó”, relató compungido Oscar Álvarez, otro vecino.
“Los quioscos de drogas van a terminar matando a todos los chicos del barrio”, advirtió.