Cuando se cumplen 12 años exactos de la desapareción de Paulina Lebbos, Virginia Mercado, la última persona que la vio con vida, comenzó esta mañana su declaración en el juicio que se lleva adelante por el crimen de la estudiante de Comunicación Social.
La joven salteña arrancó su declaración haciendo una reconstrucción de lo ocurrido el 26 de febrero de 2006 hasta la madrugada, cuando se vieron por última vez. Aquella noche, fueron a bailar a un boliche de El Abasto y luego tomaron juntas un remise. Mercado descendió primero, y Paulina siguió viaje.
"Me bajé a buscar una mochila de Paulina. Ella iba a seguir viaje hasta Estados Unidos al 1.200, a ver a su novio (…). Cuando baje con la mochila vi el rostro de paulina como si estuviera teniendo un dialogo (con el chofer); yo sabía que estaba en pareja con César Soto, padre de su hija. Nunca me lo presentó, no lo conocí. Él llamaba al departamento para hablar con Paulina para saber si había llegado. Él era celoso. No tengo certezas, mi conjetura es que él la controlaba", manifestó Mercado.
A medida que la joven avanzaba con su declaración, el fiscal Diego López Ávila advirtió algunas diferencias con lo declarado durante la etapa de instrucción. La joven, sin embargo, se excusó diciendo que han pasado 12 años de aquella noche.
Está previsto que la joven salteña, que regresó a su provincia a los pocos días de ocurrido el crimen, responda ante el tribunal (Carlos Caramuti, Rafael Macoritto y Dante Ibáñez) si conocía a Roberto Gómez, el único acusado por el homicidio.
A las 17, comenzará la Jornada Anual de la Lucha contra la Impunidad, en la plaza Independencia, que finalizará a las 21 con una marcha, a 12 años de la desaparición de la joven.
En lo que va del juicio, el comisario Nicolás Barrera, ex subjefe de Policía, imputado por encubrimiento, y Alberto Lebbos, el primer testigo en hablar en el debate, se defendieron de todas las intentonas del abogado Gustavo Morales, defensor de Eduardo di Lella (ex secretario de Seguridad) para que introdujera nuevamente la pista de los hijos del poder en el juicio por el crimen de Paulina Lebbos.
Rodríguez aseguró que lo amenazaron para que dijera que al cuerpo de Paulina Lebbos lo encontró la Policía.
Morales intentó poner en el centro de la escena al ex gobernador y actual senador, José Alperovich, y a sus hijos varones, Gabriel y Daniel. Luego ensayó lo mismo con el fallecido secretario privado de Alperovich, Alberto Kaleñuk, y con su hijo, Sergio. Pero su estrategia no tuvo éxito.