Quienes administran la sanguchería de la avenida República del Líbano al 2.300 estiman que esta noche no darán abasto por la cantidad de personas que prometieron ir.
Alejandro López Dilascio (35) está asombrado. A partir de una nota publicada esta mañana en LAGACETA.com que cuenta la historia de su sanguchería, "Fiky", su teléfono no paró de sonar. Fueron tantos los mensajes que recibió que no pudo soltar su celular en toda la mañana. "Me llegaron Whatsapps de todos los grupos en los que estoy. Por Facebook me escribió gente que no veía desde hace 15 años, que se acuerda de todo eso (del lugar)”, contó contento el administrador del local.
Muchos de los que se contactaron le adelantaron que esta noche van a ir a degustar la "mila" del lugar, esa que algunos compran sin condimento para poder llevar de viaje.
La historia de Fiky, una sanguchería que trascendió en Tucumán gracias al “boca en boca”
Por eso, esta noche no se tomará el descanso que tenía planeado e irá a trabajar. En el negocio, van a esperar a sus clientes con un poco más de mercadería que la habitual. "Nosotros trabajamos con lo justo. Si te queda, al otro día tenés cosas viejas y no es lo que hacemos nosotros", explicó.
Entre risas, López Dilascio contó que hasta le llegaron memes de la entrevista que brindó a este diario.
Alejandro no administra solo el lugar. Lo acompañan su papá, Juan Lázaro López (57) (más conocido como “Fiky”), quien es la columna vertebral del negocio; y su hermana Lourdes. Antes también iban su mamá Silvia Dilascio (57) y su otra hermana, Romina, aunque siempre están para dar una mano.
La sanguchería "Fiky" es muy concurrida todos los fines de semana desde hace 28 años sin haber sido publicitado nunca sus productos y sin tener ni Facebook ni Instagram, algo poco común entre sus competidoras en la actualidad.