Al partido entre Lanús (4)-River (2) no le faltaron las acciones polémicas. Y por el lado del perdedor, especialmente, apuntan al árbitro Wilmar Roldán, quien pidió el VAR (estrenado en América en este cruce copero) cuando sancionó finalmente el penal de Montiel a Román Martínez que se transformó en una acción clave de la histórica clasificación del "granate" a la final de la Copa Libertadores.
Silva se encargó del remate desde los 11 metros y anotó el gol decisivo. El enojo "millonario" se originó cuando, tras adelantarse 2-0, Scocco enganchó en el área local y Braghieri cometió mano dentro del área. El juez colombiano no recurrió entonces al sistema de asistencia arbitral y Marcelo Gallardo reclamó inistentemente al cuarto árbitro.