A pesar del enojo y la desazón que se desató en México luego de que se conoció que en realidad la pequeña "Frida" no existía, otra protagonista con el mismo nombre se convirtió en sensación, especialmente en las redes sociales.
Se trata de una perra labradora que ayuda en las tareas de rescate para la Unidad Canina de la Secretaría Marina de México y que a principios de mes, cuando ocurrió el terremoto del 7 de septiembre, se convirtió en heroína luego de salvarle la vida a 12 personas.
Esta "Frida" tiene siete años y junto con otros caninos forman parte de un grupo especial de tareas destinado a siniestros, colaborando con su olfato y su tamaño, ya que puede llegar a rincones dificultosos para los rescatistas.
Cuando fue cachorra, la labradora fue entrenada durante 12 meses y por estos días está colaborando en la zona de la escuela Enrique Rébsamen, que se derrumbó en la Ciudad de México luego del terremoto del martes pasado. Allí los brigadistas todavía buscan a sobrevivientes.
Frida ya está cerca de jubilarse y sus entrenadores están más que satisfechos por su labor: ha participado en operaciones de rescate en Honduras, Guatemala y Ecuador. En total ha ayudado a encontrar con vida a 56 personas, según datos aportados por la Marina.