Cuatro de los cinco rondines que quedaron aprehendidos por la muerte del adolescente Lucas Martín Moreno (16) declararon ayer que el fallecido y otros tres jóvenes se acercaron a asaltarlos. Si bien la principal sospecha es que los vigías respondieron a los tiros para evitar el atraco, sus defensores afirmaron que estos no usan armas.
Por su parte, el sexto joven que se encuentra tras las rejas, amigo de Moreno, admitió que habían salido a robar, según lo que consigna el expediente, y que en ese asalto fue herido de muerte su amigo.
“Nuestro defendido le dijo al fiscal la verdad, que ellos no poseen armas. Por eso mismo pedimos su liberación y vamos a investigar si hubo un hecho posterior a ese asalto en el que pudiera haber resultado herido el adolescente”, explicó José del Río, quien patrocina a uno de los acusados, junto con su colega Matías Díaz Molina.
Los vecinos de Villa Urquiza reclamaron por la liberación de los vigías detenidosLos otros tres que prestaron declaración fueron los que se encuentran representados por Braulio Argañaraz, quien también adujo que ellos no estaban armados. El quinto rondín aún no pudo entrevistarse con el fiscal Arnoldo Suasnabar porque se encuentra internado en el Centro de Salud. Durante el violento episodio, recibió un balazo en el pecho.
Murió un adolescente en un tiroteo por un presunto robo: hay cinco rondines detenidosEl que sí pudo presentarse ante el fiscal fue un joven de 19 años que admitió ante la Policía que esa noche había salido con Moreno a un boliche. “Antes de que termine el baile salimos y decidimos robar. Íbamos por la avenida República del Líbano. Al llegar a Colombia doblamos a la izquierda y observamos a unas cuatro o cinco personas. Fuimos a robarles. Cuando Lucas intentó bajar de la motocicleta, una de estas personas sacó un arma y comenzó a realizarle disparos, por lo que J. (otro de sus amigos) sacó un arma y respondió con más disparos. Cuando nos íbamos, sentí que Lucas se iba cayendo, por lo que lo llevamos al hospital Avellaneda”, afirmó el acusado por lesiones (contra el rondín), según un documento oficial.
Al cierre de esta edición, pese a que llevaban más de 24 horas aprehendidos, no se había resuelto la situación procesal de ninguno.