La Eeaoc, a través del Proyecto Legumbres Secas, comenzó a trabajar en este cultivo a partir del año 2012, con introducciones obtenidas de diferentes puntos, del centro y norte del país.
A partir del año 2013, inició con la evaluación de materiales, donde se obtuvieron rendimientos superiores a los 800 kg/ha, que fueron aceptables considerando que fue un año de escasas precipitaciones, siendo éstas inferiores a los 300 mm durante todo el ciclo.
Al presente se logró establecer un convenio con un banco de germoplasma de Australia, identificando nuevas líneas que presentan una calidad de grano superior (buen calibre y un color verde brillante) que fueron evaluadas en esta campaña. Esto constituye un amplio banco de germoplasma, que permitirá obtener una mayor variabilidad en los genotipos que se evalúen en los próximos años.
A modo de conclusión, en lo que respecta a la labor de la Eeaoc en este cultivo, hasta el momento ya se tienen identificadas dos nuevas variedades bastante promisorias, con buen rendimiento, sanidad y porte adaptado a trilla directa, las cuales serán inscriptas en el Instituto Nacional de Semillas (Inase) en el corto plazo.
Se continua con ensayos comparativos de rendimiento, sumado a ensayos de fechas de siembra (considerando la primera quincena de febrero, como óptima para nuestra zona), manejo de plagas, enfermedades y proyectando la evaluación de herbicidas de post emergencia en las próximas campañas, que puedan ser empleados como una alternativa al Imazethapyr y Fomesafen. Este último puede llegar a producir fitotoxicidad en el cultivo, si no se consideran ciertos aspectos, tales como empleo de sub-dosis (400 cc/ha) y aplicaciones a partir del momento que el cultivo presenta, al menos, la tercera hoja trifoliada.