Los investigadores que participaron del megaoperativo narco en Bahía Blanca y en Mendoza, en el que se secuestraron unas dos toneladas de cocaína, confirmaron que existe una conexión entre el norte argentino y el Cártel de Sinaloa, una de las organizaciones delictivas más poderosas de México.
La organización dedicada al narcotráfico opera como una empresa con presencia en 54 países. Además de América, su red se extiende a Europa, Medio Oriente, Asia, el norte de África y Oceanía, ya que ha desplazado a otros grupos criminales o efectuando alianzas, según explicó información de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA), así como de especialistas consultados, consignó "Infobae.com".
La DEA participó del operativo narco que dejó 17 detenidos, cuatro de ellos mexicanos
Rodney Benson, jefe de inteligencia de la DEA, aseguró hace unos meses: "los traficantes sudamericanos y mexicanos han establecido alianzas con las organizaciones de tráfico de drogas del Caribe, las cuales les proporcionan transporte, seguridad, lugares para esconderse y otros apoyos logísticos necesarios para las operaciones de narcotráfico".
Así escondieron la droga los narcos mexicanos detenidos en Bahía Blanca
Orígenes
Pedro Avilés Pérez es considerado el pionero en el tráfico de drogas en Sinaloa, a finales de 1960. Él es considerado como la primera generación de los principales traficantes de drogas mexicanos de marihuana, que marcó el nacimiento del tráfico de drogas a gran escala en México.
Narcotráfico: se confirmó una conexión entre el NOA y el Cártel mexicano de Sinaloa
La segunda generación de traficantes de Sinaloa está conformada por Ernesto Fonseca Carrillo, Miguel Ángel Félix Gallardo y el sobrino de Avilés Pérez, Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, mejor conocido Joaquín "El Chapo" Guzmán.
Desde hace 17 años, Guzmán se desempeñaba como líder del cártel. Había sido capturado y encarcelado, pero se fugó del penal el 11 de julio de 2015. En enero de este año, sin embargo, fue recapturado y, a pesar de eso, la organización continúa operando.
Baño de sangre
Los homicidios en México crecieron en poco más de un tercio desde enero, en gran parte por la violencia que han generado grupos delictivos que se disputan el liderazgo del cártel de Sinaloa, tras la extradición a Estados Unidos de su líder, "El Chapo" Guzmán.
Según el sitio mexicano debate.com.mx, hasta inicios de junio, se elevó a 717 la cifra de asesinatos en Sinaloa; el año pasado cerró con 1.000 asesinatos. Uno de los últimos crímenes fue el del periodista Javier Valdez, corresponsal del diario "La Jornada" y fundador del portal web "Riodoce". El trabajador de prensa fue asesinado a tiros en la ciudad de Culiacán, capital del estado mexicano de Sinaloa (noroeste), su tierra natal y "cuartel" de cárteles de "narcos" como el de Sinaloa o los Zetas.
Más de 150,000 personas han sido asesinadas en México en los últimos 10 años, desde que el expresidente Felipe Calderón tomó la decisión de sacar a decenas de miles de militares a las calles para combatir al narcotráfico, informó el portal "expansion.mx".