PARÍS.- Juan Martín del Potro se siente extraño en Roland Garros. Se pierde por los pasillos y no se ubica del todo. En realidad es normal: el tandilense llevaba cinco años sin pisar las instalaciones donde se juega el segundo Grand Slam de la temporada.

Tras perderse las últimas cuatro ediciones del Abierto francés por problemas físicos, el campeón del US Open 2009 celebró ayer su primera victoria parisina desde 2012 al vencer a su compatriota Guido Pella por 6-2, 6-1 y 6-4. Había pasado tanto tiempo desde su última participación que el torneo, claro, ya no es el mismo.

Del Potro se siente un novato en el Bois de Boulogne, pese a que alcanzó las semifinales en 2009 y los cuartos en 2012. “Después de cinco años no encuentro el sitio al que tengo que ir y me pierdo constantemente”, explicó en la sala de prensa. “El Abierto de Francia es un torneo increíble para los argentinos y me encanta estar aquí de nuevo después de cinco años. En ese tiempo era un torneo totalmente diferente. Creo que mejoró cada día, cada año. Estoy muy feliz de estar de vuelta”, señaló el ex N°4 del mundo.

En cuanto al partido, y no obstante ciertos problemas con el revés, Del Potro está más que satisfecho con su nuevo debut en Roland Garros.“Estoy al nivel más alto desde mi vuelta”, aseguró, tras una hora y 49 minutos de partido ante Pella. “Estoy jugando un gran tenis en una superficie en la que no me encuentro lo más cómodo”.

El siguiente rival de “Delpo” será el español Nicolás Almagro. (DPA-Especial)