Aunque ya dejó de llover y el agua les permitió volver a sus casas, centenares de personas que sufrieron las inundaciones en La Madrid regresaron hoy a la ruta 157, pero esta vez, para reclamar por ayuda estatal y pedir la intervención de la comuna, a cargo del delegado Dardo Herrera. El paso de autos está interrumpido en dos puntos y es habilitado cada tres horas.
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Mientras esperan que las promesas lanzadas por funcionarios provinciales y nacionales se materialicen, un centenar de vecinos de la localidad más castigada por las inundaciones de fines de marzo quemaron cubiertas para hacer escuchar sus quejas. El reclamo más repetido apunta a la intervención del gobierno que encabeza Herrera. Lo señalan como responsable de un cuestionado relevamiento, que impide o parcializa la llegada de la ayuda prometida por el Estado.
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Con pancartas, pidieron que desde el gobierno concrete las obras sobre el cauce del río Marapa, que los inundó cuatro veces en la última década. Temen que las lluvias regresen y vuelvan a perder todo una vez más.
El malestar de la población de La Madrid encontró su detonante en la sede de la Caja Popular de Ahorros de Graneros. Luego de recorrer los 22 kilómetros que separan a las dos localidades, muchos de los damnificados descubrieron que sus nombres no figuraban en los listados, elaborados por el Ministerio del Interior, para acceder al crédito impulsado por la entidad creditica provincial.
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Desde ese momento, los manifestantes decidieron volcarse a la 157 y a las inmediaciones del edificio comunal para llevar sus reclamos y pedir, además, la interveción del gobierno que conduce Herrera.