Deberías saber que si formás parte de los grupos de riesgo (ver “Necesitan protegerse...”) tenés que acudir cuanto antes a un centro de salud para que te apliquen la vacuna contra la gripe. Lo mismo que tus hijos, si tienen entre 6 y 24 meses.
Lo que muy posiblemente no sepas es que las vacunas que tenemos disponibles son un gran motivo de orgullo: están siendo producidas en la Argentina con la mejor tecnología y forman parte de lo que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) considera uno de los calendarios de inmunización más completos y avanzados de América.
“Este calendario es un ejemplo para el mundo -destacó Susana Devoto, responsable de la Dirección Nacional de Control de Enfermedades Inmunoprevenibles de la Nación-. Hemos pasado de ocho vacunas en 2003 a 19 vacunas este año”.
“En 2011 se había incorporado al calendario la vacuna conjugada13 valente para menores de 2 años. Este año, el Ministerio decidió, como estrategia, aplicar esta misma vacuna a mayores de 2 años pertenecientes a grupos vulnerables y a mayores de 65 años, a través de un esquema secuencial”, añadió. Destacó que, como ya se venía aplicando la polisacárida 23 valente, hay variantes a la hora de completar la inmunización. “Por eso es muy importante conservar el carnet de vacunación para que el programa se pueda implementar”, añadió .
Devoto trazó el cuadro de situación durante un encuentro organizado por Sinergium Biotech, una compañía argentina especialista en investigar, desarrollar, producir y comercializar vacunas, en el marco de la campaña antigripal 2017. Sinergium está produciendo, entre otras, tres de las vacunas últimamente incorporadas al calendario.
En detalle
“Hoy, la Argentina y el Salvador tienen la mayor cobertura antigripal del mundo”, destacó Abel Di Gilio, director comercial de Sinergium y contó que encuentros como ese se repiten desde 2011, un año después de que dos laboratorios argentinos, Elea y Bagó, iniciaron su primera alianza estratégica: acordaron con la suiza Novartis la transferencia de tecnología que permitiera garantizar inmunización contra la gripe hasta que la vacuna se produjera en el país (ver “Breve historia...”).
“Veníamos de la pandemia, que jaqueó las provisiones de vacunas en todo el mundo -recordó-, y la presidenta Cristina Fernández de Kirchner lanzó el desafío: ‘a ver si lo empresarios argentinos se ponen los pantalones largos’ -dijo-. Nos los pusimos”. “Claro que en el primer encuentro éramos muchos menos”, bromeó, antes de contar los avances logrados y los proyectos iniciados.
Modelo que avanza
El proyecto se encaminó y se fortaleció el modelo: desde entonces, otros dos laboratorios de primera línea (Merck y Pfizer) ofrecieron formar sendas alianzas estratégicas para que se puedan hacer en el país las vacunas contra el HPV y la 13 valente neumocóccica. Además, en otra planta, están produciendo productos biofarmecéuticos.
Para todos ellos está encaminado el trámite de reconocimiento de la FDA (agencia del gobierno de EE.UU. responsable de la regulación de alimentos, medicamentos, etc.), de manera que próximamente sea posible cumplir otro sueño: la exportación.
“Estamos utilizando la mitad de la capacidad instalada -informó Di Gilio-; producimos, en un solo turno, vacuna antigripal entre enero y junio, una vez que la OMS determina cuáles son los virus circulantes; entre septiembre y diciembre se producen los antígenos. La planta está produciendo 2 millones de dosis por mes”.
Lo que viene
Hasta ahora, y desde hace más de 60 años, el virus con que se realizan las vacunas (que está adaptado para ello) se cultiva en huevos de gallina. Pero las cosas han empezado a cambiar: una nueva alianza estratégica permitirá una producción más eficiente, menos riesgosa y más diversificada (se aplicará tecnología que está transfiriendo Protein Science para varios tipos de vacunas) utilizando ingeniería molecular. No se trabaja con el virus, sino con una proteína de este que puede ser replicada en virus inocuos presentes en insectos, explicó a la prensa Juan Ceriani, director de operaciones de Sinergium, uno de los científicos que volvieron al país para encarar este desafío de producción nacional.