Las valoraciones políticas con respecto al acatamiento al paro nacional concretado ayer (ver página 10) resonaron en la Legislatura.

El edificio ubicado en calle Muñecas 951 no registró actividad oficial durante toda la jornada, ya que la totalidad de los gremios que contienen a los trabajadores legislativos de planta permanente adhirieron a la medida de fuerza.

Sin embargo, los empleados transitorios -integran, por ejemplo, los bloques políticos y los equipos de asesores- no suelen participar de las actividades sindicales; la gran mayoría, de hecho, responde únicamente al legislador que requirió su contratación.

Esta distinción derivó en una polémica que bien podría estar enmarcada en la “grieta”, como se denomina desde hace años a la línea política o conceptual que separa a quienes son afines a la alianza Cambiemos y a quienes se encolumnan detrás del peronista Frente para la Victoria (FpV).

Legisladores del bloque de la Unión Cívica Radical (UCR) protestaron porque, según su versión, los miembros de sus equipos de asesores no pudieron ingresar ayer a primera hora al palacio legislativo para efectuar sus labores de rutina. “Si bien es cierto que el derecho a la huelga se encuentra plasmado en nuestra Carta Magna, también lo está el derecho a trabajar, por lo que le impetro sirva arbitrar los medios pertinentes a fin de garantizar el acceso del personal de bloque a sus (puestos laborales)”, señaló el radical Fernando Valdez en una nota dirigida al vicegobernador, Osvaldo Jaldo. A través de su cuenta de Twitter, el integrante de Cambiemos agregó: “desmiento categóricamente que en la Legislatura se haya trabajado de manera normal; al personal de la UCR se le negó la entrada”.

Además de Valdez, sus “correligionarios” José Canelada -jefe del bloque radical- y Eudoro Aráoz se quejaron por la situación.

Jaldo, por su parte, desmintió que el Poder Legislativo les haya otorgado asueto a los empleados. Según el vicegobernador, el edificio estuvo abierto durante toda la jornada. “Se respeta a todos los que quieran ir a trabajar”, indicó.

Canelada subió una foto a Twitter en la que se veían los pasillos de la Cámara vacíos. “Esta mañana nuestros equipos no podían entrar a la Legislatura. Allí les informaron que se había declarado asueto”, indicó el titular de la bancada radical. Añadió que su colega, Adela Estofán, tampoco “estaba enterada”. “Debimos llamar para que autorizaran a nuestros equipos de trabajo a ingresar”, indicó.

Jaldo, a través de una entrevista radial, negó esa versión. “En la Legislatura no hay absolutamente ningún asueto; a las 7 estuve en mi despacho”, aseveró el vicegobernador. Advirtió que “si alguien dice que estamos en asueto, está faltando a la verdad”. Y cuestionó a los radicales que se manifestaron en esa línea. “No sé a qué Legislatura habrá ido Aráoz”, ironizó.

Este radical expresó su réplica también vía Twitter. “Mi despacho está abierto -escribió Aráoz-. Ya que el vicegobernador está trabajando, bien podría hacer llegar la respuesta a mi pedido de rendición por los ‘gastos sociales’ de 2015”, manifestó, en alusión a los $ 615 millones ejecutados como ayudas sociales en aquel año electoral.

Así, más allá del debate sobre los derechos de los trabajadores, el paro de ayer causó tensiones políticas.