El domingo por la noche, cientos de personas marcharon hacia la comisaría de Delfín Gallo y luego atacaron dos casas del barrio Luján. Estaban enardecidos por el secuestro y la violación de una joven de 15 años con retraso madurativo. Algunas horas después de la manifestación, durante la madrugada, uno de los acusados por este delito se presentó en la comisaría de Lastenia y pasó derecho a una celda.
Según se pudo saber, desde la Justicia se ordenó a los policías que lo tuvieran aprehendido y luego lo presentaran en Tribunales, ante el fiscal Arnoldo Suasnabar. Luego de varias horas en la fiscalía, volvió alrededor de las 20 en un patrullero a la comisaría, en calidad de detenido. Se lo acusa por los delitos de secuestro y abuso sexual con acceso carnal, misma carátula que le aplicarán a sus cómplices. Estos habrían tenido cautiva durante cinco días a la víctima a menos de 10 cuadras de la comisaría local.
Según informaron fuentes del caso, el detenido tiene 20 años y habría sido identificado a través de las fotografías que se filtraron en las redes sociales de la violación. Al parecer, lo abusadores compartieron las imágenes a través de WhatsApp con algunos amigos y estos, a su vez, las reenviaron a otros contactos. Cuando se dieron cuenta, habían perdido el control sobre estos archivos, que pronto aparecieron en Facebook.
Acorralados porque en las imágenes se veían sus caras (posaban sonrientes mientras la muchacha trataba de quitárselos de encima), dejaron a la víctima en una cancha de ese barrio y se esfumaron de la localidad; sabían que irían tras ellos. De hecho, cuando los vecinos atacaron las casas, las luces estaban apagadas y no había nadie en el interior.
Ahora la Justicia se encuentra tras los pasos de los otros dos abusadores de la adolescente. Serían de la misma edad y del mismo barrio que el detenido, aunque se sabe que allí no están porque también atacaron sus casas. Con todo, los investigadores del caso son optimistas: conocen sus rostros. Además, las fotografías servirán como una prueba incontrastable a la hora de pedir mayores medidas en contra de ellos o llevarlos a un juicio. Según trascendió, uno de ellos sería un tal “Maxi”.
Mientras tanto, la víctima se encuentra internada en la Maternidad, lugar donde la atienden por sus lesiones.