“Bailar no es un deporte, ni un comercio, es un arte. No es saber los mejores pasos, es saber usar lo que tienes. Es ser feliz con lo que haces a diario; no es para impresionar, es para expresar”. Estas son las respuestas que da Sergio Berto cuando se le pregunta sobre la esencia de la danza.
Maestro, director y coreógrafo en algunas instituciones como el Ballet del Mercosur (Buenos Aires), Ballet Argentino (La Plata), Ballet UnCuyo (Mendoza) y Compañía de Teatro Musical del IUNA (Buenos Aires), entre muchos otros, realizó coreografías para Julio Bocca y Maximiliano Guerra.
Desde los 11 años comenzó los estudios en su Brasil natal y una verdadera carrera artística, que lo llevó por distintas ciudades, hasta radicarse en Perú.
Mientras mantenía la entrevista con LA GACETA, el bailarín daba una clase en San Juan y viajaba luego a Mendoza. Hoy estará en esta ciudad: “es la primera vez que voy a Tucumán, de cuyo arte me han hablado maravillas, así que estoy muy ansioso por llegar”, le dijo a LA GACETA.
Invitado por la Fundación para el Desarrollo de las Artes Escénicas (9 de Julio 613), Berto brindará en ese escenario un workshop sobre danza contemporánea y jazz, en lo que denomina en general como “poesía del movimiento”.
- Con tu experiencia internacional, ¿qué dirección crees que tiene la danza contemporánea?
- La danza contemporánea siempre tuvo una dirección. Para mí siempre han sido claras las inquietudes de una comunidad y la inquietud de uno mismo en esa orientación. Los montajes contemporáneos, podemos decir, es la traducción misma de la contemporaneidad, de este tiempo que vivimos. Y el movimiento tiene que ver con eso: en determinado momento con el cuerpo se alababa la naturaleza, o se planteaba algún reclamo con el cuerpo. Pero siempre tuvo una dirección; varía mucho, eso sí, según lo que se desea expresar.
- ¿Cuáles son las técnicas que más te interesan? ¿Trabajás con la improvisación?
- Si hablamos de la pedagogía y niveles técnicos, un intérprete contemporáneo siempre está buscando distintas formas de expresar a través de su cuerpo; siempre busca a través de lenguajes; algo que adaptar a su forma de pensar y de sentir a través del movimiento. Claro que uso la improvisación, porque es la técnica que más permite el despertar de la espontaneidad, de la conciencia y de la esencia de cada intérprete, en mis clases y seminarios lo planteo. Pero es una de las técnicas, también se debe recurrir a otras porque a veces tenés la esencia, pero necesitas más herramientas técnicas para que la esencia brille mucho más.
- ¿Qué es la danza?
- Una filosofía de vida, que uno utiliza para ser feliz. Es un arte transformador, que integra, es sanador, aunque algunos lo quieran hacer un poco elitista. El proceso físico es una consecuencia de la actividad, pero no es lo esencial.