Quizás lo más jugoso que dejaron estos últimos dos partidos de Atlético en la Copa Libertadores no estuvo dentro de la cancha, sino fuera. En las rutas, en los aeropuertos, en los hoteles lujosos y en los hospedajes humildes, en los paseos históricos y en todos aquellos lugares donde se cruzaron las historias de los hinchas “decanos” que gastaron sus ahorros, pidieron prestado o tarjetearon hasta el límite del margen para acompañar al equipo hasta Ecuador o Colombia.
Pero Atlético no es el único que tiene hinchas capaces de seguirlo a cualquier parte. Parado en la puerta del hotel Sheraton estaba Luis de la Ossa (foto), con su historia, un bolso y una bandera a cuestas. Varios días antes de que se jugara el primer partido, este loco de Barranquilla ya había iniciado su aventura hacia Tucumán.
“Salí el lunes de la semana pasada. Me he venido transportando de país en país, de ciudad en ciudad. Durante el día trabajaba de cualquier cosa, y si tenía que pedir, pedía, para juntar dinero y seguir camino durante la noche. De esa manera me ahorraba también el hospedaje. Hasta que llegué aquí el martes”, contó Luis, quien le manifestó su apoyo a los jugadores del “Tiburón” agitando su bandera, que rezaba “Katalán”. “Representa a un amigo que me mataron allá en Barranquilla el 12 de diciembre. Por eso traje esta bandera conmigo, para rendirle homenaje y que él desde donde esté me acompañe”, reveló el fanático. Obligado a vivir al día, decidió pasar la noche en algún rincón de la Terminal de Ómnibus, para ahorrarse el hospedaje.
“Ganaremos 2 a 1. Atlético saldrá a atacarnos, abrirá su defensa y ahí aprovecharemos nosotros”, pronosticó Luis.