La francesa Iris Mittenaere, de 24 años, se alzó en la madrugada de hoy en Manila con la corona de "Miss Universo", en una velada en la que "Miss Haití", Raquel Pelissier, y "Miss Colombia", Andrea Tovar, quedaron finalistas.

Nacida en Lille, en el norte de Francia, Mittenaere está estudiando odontología. Su victoria en la edición 65 del concurso revalida la hazaña que consiguió su compatriota Christine Martel hace 64 años, en 1953. "Estoy muy orgullosa de llevar esta corona a Europa", dijo en conferencia de prensa tras alzarse como reina mundial de la belleza, según informó la agencia Dpa. "Creo que Francia y Europa realmente necesitan una 'Miss Universo'", dijo en referencia a la ausencia de títulos para el continente en los últimos años.

   Coronación. La reina anterior le entrega la corona a la nueva representante de la belleza mundial. 

Anteriormente, durante la competición, la joven tuvo que abordar la crisis de los refugiados declarándose a favor de que los países puedan elegir si abrir o cerrar sus fronteras. Y señaló que países como Francia eligieron recibir refugiados. "Tener las fronteras abiertas nos permite viajar más al mundo y ver lo que hay fuera", añadió en una respuesta que fue su pasaporte a la ronda final. Más tarde, confesó que la pregunta le había resultado difícil.

   La nueva reina. Tiene 24 años y estudia odontología. 

"En francés tenemos tres palabras: libertad, igualdad y fraternidad", declaró. "Tenemos gente a favor de abrir las fronteras y gente en contra, y yo no quiero elegir. Soy todas esas personas", añadió.

En la última ronda de preguntas, Mittenaere dijo que fracasó varias veces en su vida, pero que siempre aprendió a seguir adelante. "Si esta noche no soy una de las ganadoras, seguiré habiendo tenido el honor de estar entre las tres finalistas", agregó.

  Simpática y divertida en cada pasada.

Ahora, como nueva "Miss Universo", la joven espera poder promover la educación infantil y la concientización sobre el sida, además de impulsar a las mujeres a tener más confianza en sí mismas. "No necesitamos maquillaje ni operaciones, somos hermosas, somos mujeres", enfatizó.

   El turno del bikini. Con su sonrisa compró a jurado. 

En total, 86 "misses" de todo el mundo se disputaban relevar en el trono a la filipino-germana Pía Wurtzbach. La gala volvió a estar conducida por Steve Harvey, quien en la pasada edición (2015) se equivocó anunciando que la corona era para la aspirante colombiana.