El conflicto por la explotación del servicio de la línea 11 se trasladó a la plaza Independencia. Ayer por la tarde, hartos de la falta de solución al problema, los choferes iniciaron una protesta justo frente a Casa de Gobierno y colocaron una veintena de ómnibus sobre calles 25 de Mayo y San Martín. Por otro lado, la Unión Tranviarios Automotor (UTA) iría a la Justicia para pedir que el litigio entre la Municipalidad capitalina y la firma Inverbus SA no interfiera en el pago de los salarios.

Los trabajadores de la línea 11 decidieron movilizarse a la plaza porque aún no cobraron los sueldos de diciembre ni el bono de fin de año debido a una medida cautelar que frenó la explotación del servicio.

La empresa Inverbus SA debía abonar los haberes a los 106 empleados, ya que los trabajadores prestaron servicio a esta firma hasta el 29 de diciembre. El gerente Oscar Alonso manifestó que no puede pagar los sueldos porque la Municipalidad le retiró la concesión de explotación de la ruta. El empresario argumentó que quien debe abonar la planilla salarial es la empresa Leagas SA, firma que recibió el permiso provisorio por la Intendencia y que usufructuó la concesión los últimos tres días de diciembre.

Hasta antes de la medida cautelar que dejó sin ómnibus a los usuarios, regía un acuerdo entre UTA y Leagas SA para el pago de los sueldos, vacaciones y bono de fin de año por un valor de $ 3.000. El miércoles el apoderado legal de Leagas SA, Jorge Berreta ratificó a LA GACETA lo firmado en el acta con el gremio. “Por supuesto que vamos a respetar y honrar lo firmado siempre que sigamos a cargo de la explotación del servicio”, dijo.

Ayer a la mañana inspectores de la Secretaria de Trabajo de la Provincia se presentaron en ambas empresas de transporte para constatar si se abonarían los sueldos. “Hemos actuado de oficio y solicitamos esta medida a la cartera laboral. Alonso dijo que no podía abonar los sueldos y Berreta afirmó que lo haría si continuaba con la concesión provisoria. Todo quedó notificado mediante actas”, detalló César González de UTA.

Incertidumbre

Todos los trabajadores que llevaron los ómnibus y protestaron en plaza Independencia coincidieron en que son ajenos a este conflicto. “Hay mucha incertidumbre. No nos importa quien se haga cargo de la empresa, nosotros queremos cobrar”, lanzó un chofer que no quiso dar su nombre por temor a represalias. Miguel Peralta, otro chofer, se despegó dijo: “queremos trabajar para Inverbus, la otra empresa arregló con la Municipalidad y nos arrebató todo”.

La Justicia debe resolver el recurso de revocatoria interpuesto por la Municipalidad de San Miguel de Tucumán a la medida cautelar que suspendió los decretos que disponían cambios en la explotación de la línea 11.

Desde UTA consideran que el tiempo de espera se acabó, por eso hoy el gremio -en representación de los choferes- solicitarían una reunión con los magistrados en feria judicial de la Sala I de la Cámara en lo Contencioso Administrativo, Horacio Castellanos y Salvador Ruiz. “No nos queda más que ir a hablar con los jueces. Pediremos que nos reciban y ahí veremos que pasos tomaremos”, adelantó un integrante de la comisión directiva de UTA.