En la Casa Histórica confluyen sentidos y significados de la más variada especie, desde los dibujos escolares de la infancia hasta el sueño de una Argentina federal. También hay intereses económicos: se trata de la fuente principal de alimentación del sector turístico local. Y un producto asociado al museo, el espectáculo de luz y sonido montado hace 46 años para recrear los hechos de 1816 y sus consecuencias, garantiza que los turistas se queden una noche o una noche más en esta ciudad. “Es una atracción muy importante y emblemática, que ya está incorporada: los visitantes la demandan y, por ello, urge recuperarla”, manifestó Sebastián Giobellina, presidente del Ente Tucumán Turismo.
El show fue donado por la compañía Phillips y en su momento empleaba la mejor tecnología de la época. Si bien el paso del tiempo acarreó una obsolescencia inevitable, el espectáculo seguía emocionando por la potencia de los relatos y de las voces que intervenían, entre ellas, la de Mercedes Sosa. Aunque la Casa Histórica forma parte del patrimonio cultural de la Nación y, por ende, su administración depende de la Casa Rosada, la atracción inventada por Phillips quedó en manos de la Provincia, específicamente del Ente que encabeza Giobellina.
“La Nación suspendió el espectáculo en abril con motivo de las refacciones encaradas por el Bicentenario. Se suponía que íbamos a volver a ponerlo en marcha con la reapertura de la Casa Histórica, pero eso no sucedió. Desde julio estamos solicitando la restauración: después de algunos desencuentros, hemos logrado la promesa de que el espectáculo será reanudado en marzo con un formato modernizado”, manifestó Giobellina en un diálogo telefónico y mientras preparaba el Dakar. Por su cuenta, Pablo Avelluto, ministro de Cultura de la Nación, aseguró que habrá avances en este sentido.
Giobellina dijo que desconocía la serie de medidas tendientes a reforzar el manejo transparente de la Casa (se informa por aparte). Al respecto, precisó que no había recibido inquietudes sobre el estado del edificio, cuestión que preocupa a la Asociación de Amigos.