El conductor del Fiat Siena que provocó un trágico accidente el sábado al atardecer en la autopista Tucumán-Famaillá, donde fallecieron tres mujeres, seguirá guardando silencio como parte de una estrategia de la defensa. Mientras tanto, el fiscal Washington Navarro Dávila fue duro al referirse a su accionar: “se representó el riesgo que significaba conducir en estado de ebriedad y a excesiva velocidad y sin embargo no depuso su comportamiento y siguió adelante”. Según se supo, tenía 1.79 de alcohol en sangre en ese momento.
La tragedia se produjo a la altura del Mercofrut, cuando cinco mujeres regresaban de una jornada de derechos humanos realizada en la “Escuelita de Famaillá”. Las víctimas viajaban en un Renault Clio cuando un Fiat Siena, que circulaba en la arteria contraria de la autopista, salió de su carril, cruzó la platabanda y las embistió de frente. En el lugar del hecho perdieron la vida Alejandra Würschmidt y la referente de la agrupación Hijos Natalia Ariñez. Una tercera víctima, la periodista Marianella Triunfetti, falleció más tarde en el quirófano del hospital Padilla. Las otras dos ocupantes del auto, Silvia Sandoval (madre de Ariñez) y Julia Albarracín (abogada querellante en la causa Ismael Lucena), todavía están internadas, aunque fuera de peligro.
En cuanto al chofer del Siena, Adrián Dante Juárez de 39 años, solo sufrió un golpe en una pierna. “Me presenté en el lugar del hecho y personal policial me manifestó que el conductor estaba en estado de ebriedad, entonces dispuse que el médico de la Policía le haga un examen clínico, aparte de la obtención de las muestras para el examen de alcoholemia, y todos los signos dieron que estaba en un evidente estado de embriaguez”, remarcó el fiscal.
Silencio
La Policía lo trasladó a Tribunales la mañana siguiente para que prestara declaración, pero Juárez permaneció en silencio. Luego Navarro Dávila pidió su detención, que fue concedida por el Juzgado de Instrucción, y lo imputó por los delitos de triple homicidio y lesiones, ambos con la figura del dolo eventual.
Consultado sobre un evidente cambio de postura por parte de la Justicia respecto a los accidentes de tránsito, Navarro Dávila afirmó que responde a la gravedad de ciertos casos y a que cuentan con elementos más inmediatos desde el punto de vista técnico. “Este ha sido un hecho muy grave que se pudo haber evitado”, agregó.
La defensa, representada por José Luis del Río y Valeria Lescano, adelantó que Juárez no declarará hasta que conozcan los informes periciales. “Nuestro objetivo es buscar el cambio de calificación para mejorar su situación personal”, comentó del Río, y explicó que pedirán que se lo impute por homicidio culposo agravado, que no prevé una pena mayor a cinco años. “Vamos a evaluar la graduación alcohólica que salió en el dosaje y cuál es la incidencia que tuvo en el resultado”, sostuvo. Respecto al conductor, comentó que está con dolores y que “sigue en estado de shock”.