La postal era ya repetida en ese cruce de avenidas: autos y camionetas que bajaban por la Perón, en dirección al centro, se accidentaban y quedaban arriba del monumento elevado sobre la rotonda, completamente destruidos, en algunos casos volcados, pero siempre accidentes impactantes. Esa era la situación más extrema; la más frecuente, sin embargo, el caos vehicular en las horas pico y en las demoras para avanzar ya que la rotonda deriva a cuatro áreas de mucho tránsito.
Por estos días la Municipalidad de San Miguel de Tucumán está instalando un complejo semaforizado en la intersección de las avenidas Belgrano-Perón con Camino del Perú, en el límite entre la capital y Yerba Buena. Ayer se estaban realizando los trabajos de excavación y posteriormente se colocarán las columnas y se harán las conexiones necesarias para su funcionamiento, informó la administración capitalina en un comunicado, justificando la inversión en la necesidad de brindar mayor agilidad y seguridad a los conductores que transitan por esas avenidas.
Además del complejo semaforizado, se habilitará el giro libre a la derecha en las ochavas noreste (dirección a Tafí Viejo) y sureste (hacia Yerba Buena), para lo que se colocarán divisores de calzada que delimitarán el carril.
La avenida Belgrano es una vía de circulación importante que conecta en el sentido este-oeste San Miguel de Tucumán con Yerba Buena. Camino del Perú, en tanto, vincula en el sentido norte-sur la capital y Yerba Buena con localidades muy pobladas como San José, Villa Carmela y Tafí Viejo. La rotonda fue construida en la década del 90 y con el aumento del parque automotor y la población de la zona, en ciertos horarios se colapsa, remarcó la Municipalidad.
Debido a las demoras eran frecuentes los reclamos de los vecinos para que se diera una solución en el lugar. El servicio de WhatsApp de LA GACETA dio cuenta de esa situación en reiteradas ocasiones, publicando fotos que enviaban conductores indignados con los embotellamientos durante las horas pico.