Kit Eaton / The New York Times

Recién este año nos enteramos que la información de las cuentas de al menos 500 millones de usuarios de Yahoo fueron robadas en 2014, noticia que nos sirvió para que todos aprendamos que tenemos que ser más inteligentes sobre nuestra seguridad digital. Y eso incluye, por supuesto, a nuestros teléfonos inteligentes, que cada vez son más depósitos de toda clase de información sobre nuestra vida.

Convertir nuestros smartphones en verdaderas fortalezas de datos requiere del uso de contraseñas fuertes y nunca usar la misma contraseña para distintos servicios. Por suerte, hay un montón de aplicaciones que pueden ayudarte a recordar todas esas contraseñas.

Dashlane, que se puede descargar gratis para iOS y Android, es un excelente sistema para asegurar las contraseñas. La aplicación, que es esencialmente una caja fuerte para todas tus claves online, tiene solo una contraseña maestra para acceder (y recordad). Después de introducirla (por supuesto tiene que ser una contraseña lo más compleja posible), tenés acceso a todas las otras contraseñas guardadas en la aplicación.

Esto quiere decir que la gente se puede mover de usar contraseñas fáciles de recordar, del estilo “123456”, a otras más largas y complejas, que son más difíciles de descubrir por los hackers. Para ayudar en esta tarea, Dashlane tiene un generador de contraseñas que los usuarios pueden amoldar a su gusto. Por ejemplo, cambiando el largo de las contraseñas o especificando si deben incluir símbolos.

Dashlane, además, puede automáticamente actualizar las contraseñas. También podés crear tus propias contraseñas y la aplicación analizará si es resistente a hackers. La app tiene también un navegador propio que está diseñado para ser seguro, así la gente puede hacer compras y movimientos bancarios con algunas preocupaciones menos sobre si la información que comparten puede ser comprometida. También les permite a los usuarios pasarse sus contraseñas con otras personas sin miedo de que sean rastreadas, lo que es muy útil para quienes comparten cuentas. Una versión mejorada, que cuesta U$S 40 al año, ofrece también algunas características extras, como un backup al estilo de los servicios en la nube.

Desde el reloj

Si el precio de Dashlane no te convence o te parece una aplicación muy del estilo hombre de negocios, podés tratar Keeper, que es gratuito para iOS y Android. Como Dashlane, Keeper es una caja fuerte para tus contraseñas y también las genera automáticamente, junto a otras características. Pero Keeper también ofrece una interfaz más rica en gráficos, que ofrece concejos y pistas sobre cómo usar la aplicación.

También te permite guardar tus contraseñas en distintas carpetas, para separar las que son de trabajo de las personales, por ejemplo. Las carpetas también pueden tener otra información, como los números de las cuentas bancarias, que no querés que sean accesibles fuera de la aplicación.

Otro agregado de seguridad que tiene Keeper es que tiene una extensión para relojes de Apple y Android, que permite acceder a la cuenta a través de relojes inteligentes. La idea es que si alguien roba tu celular, al menos te quede la información en el reloj para acceder, modificar o borrar.

A pesar de esas ventajas respecto de Dashlane, Keeper no tiene la opción de actualizar automáticamente las contraseñas, Además, algunas de sus características más fuertes, como el backup en la nube y la sincronización de contraseñas entre dispositivos, requiere un pago extra que va de los U$S 10 para arriba.

Más opciones

Por supuesto, en esta categoría también hay algunas aplicaciones que ya están muy bien establecidas. La más conocida es 1Password. La app tiene muchas funciones además de guardar contraseñas: te permite salvar información de las tarjetas de crédito y llena automáticamente los campos de pago en algunos sitios de compras online. Esta aplicación promete una protección encriptada fuerte, incluso si perdés tu teléfono y también tiene una app para gestionarla desde Apple Watch, así podés ver la información de tus contraseñas en tu muñeca.

No soy muy fanático de la interfaz de esta aplicación porque encuentro muy fácil perderme en sus varios menús. Pero 1Password es poderosa y tiene versiones gratuitas para Android y iOS. Y una versión mejorada, con acceso a todos sus servicios, que cuesta U$S 10.

LastPass, una aplicación popular para iOS y Android, también vale la pena de probar. Actúa como una bóveda segura para información como los números de las tarjetas de crédito y su alegre interfaz hace que todo el tema de manejar contraseñas parezca menos monótono.

Si sos usuario de Android, echá un vistazo a KeePassDriod. Esta aplicación es gratuita y se basa en una arquitectura de base abierta. Tiene una encriptación fuerte y su interfaz, que es bastante sencillo pero funcional, lo hace ver menos complejo que algunos de sus competidores.