Se llama “Valentín” porque nació el 14 de febrero. Es un gato pequeño salvaje, hijo de dos yaguarundís rescatados de los cazadores por guardafaunas. El contacto con los humanos hace imposible su liberación, pero Valentín fue criado aislado y en condiciones para que pueda cazar su alimento. Ayer fue liberado por miembros del equipo de rescate de la Reserva y guardaparques del Parque Sierra San Javier.