La brecha entre el precio que recibe el productor y el de las góndolas se multiplicaron por seis veces, en promedio, en octubre. Ese dato significó una escalada de un 21,9% con relación a la diferencia de septiembre de 4,9, lo que significó el mayor nivel desde enero de 2016. El deterioro se debió a la ampliación de la diferencia en el zapallito, el pimiento y el brócoli.

Los datos correspondieron al Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD), que elabora desde agosto del año pasado el área de Economías Regionales de Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Este indicador tiene de base una canasta de 20 alimentos agrícolas que se consumen en fresco en la mesa familiar, relevados durante la segunda quincena de octubre.

La brecha del zapallito se duplicó desde 3,07 en septiembre a 7,65 en octubre, ya que el precio de origen sufrió un desplome que no fue acompañado por el valor en góndola. También registraron alzas grandes las brechas del pimiento y el brócoli, a 6,44 veces y 7,25 veces, respectivamente.

Las mayores bajas en las brechas se registraron en el ajo, la zanahoria y la acelga. La diferencia de precios del ajo cayó 33,5%, a un nivel de 2,25 -el mínimo para su serie-, gracias a un salto en el precio al productor.

La zanahoria también mostró una mejora en su valor de origen; mientras que la acelga continuó con una deflación al consumidor que comenzó al inicio de este año.

En los precios al consumidor, el limón encabezó las alzas con un 42,4%, llegando a un valor récord tras un fuerte incremento mensual de casi $10 el kilo.