“Ante la bochornosa situación que sufre el Concejo Deliberante de Yerba Buena, víctima del accionar cuasi golpista de cuatro ediles liderados por Héctor “Pilón” Aguirre, decidimos hacer pública nuestra renuncia a cualquier lugar en la futura mesa de conducción”. Así comienza el texto que los concejales Pedro Albornoz Piossek -del macrismo- y Lucas Cerúsico -del radicalismo- enviaron a este diario.
Luego dijeron que tomaron esa decisión por respeto a los vecinos, principalmente. También consignaron que es necesario que se aprueben proyectos de modo urgente, como un plan de arbolado presentado por ellos, en agosto. “Nunca pedimos la presidencia, y no lo haremos. Nuestra obligación es trabajar por la ciudad; no por intereses mezquinos y ocultos, que se sospecha que son manejados por personajes oscuros de la política tucumana”, prosiguieron.
Finalmente, le exigieron al presidente del Concejo, Javier Jantus, que convoque a una sesión para hoy. En el caso de que sus colegas no den quórum, le pidieron que actúe de forma responsable y que haga cumplir el reglamento interno y la Ley Orgánica de Municipios. Hasta antes de este comunicado, Cerúsico era el postulante a la vicepresidencia primera de la terna identificada con el oficialismo gobernante, que es encabezada por Marcelo Rojas, del partido municipal Cambiemos Yerba Buena.