Los resultados finales de las elecciones de Estados Unidos dejaron un inesperado ganador: el republicano Donad Trump gobernará la potencia mundial norteamericana al haber conseguido 279 electores, nueve más de los que pide el Colegio Electoral para llegar a la Casa Blanca. Sin embargo, lo hizo con 59.440.482 votos, 207.875 menos que los que obtuvo la candidata demócrata Hillary Clinton.
Se trata de la quinta vez en la historia electoral norteamericana que se consagra al candidato menos votado como presidente. El episodio anterior se había dado con George W. Bush y Al Gore en 2000, cuando la diferencia de votos era de 500.000 en favor del demócrata pero el republicano consiguió cinco electores más, rememora Tn.com.ar
Todo se explica en el sistema electoral que tienen los estadounideses. No tienen una "democracia directa" sino una "representativa" en la que cada estado tiene una determinada cantidad de electores que no se reparten de acuerdo a la cantidad de votos. Es decir, el que gane por un voto el distrito se lleva la totalidad de los electores.
Por ejemplo, ayer, Hillary obtuvo en el estado de Florida el 47% de los votos. Perdió "la madre de todas las batallas" con el republicano, que fue votado por el 49% de los votantes. Sin embargo, los 29 representantes del colegio electoral que otorga ese distrito quedaron para Trump.
El magnate ganó ayer por poca diferencia en estados claves, que otorgan muchos electores, como en el denominado "cordón industrial" Ohio, Pensilvania y Michigan. Esto le permitió llegar a la Casa Blanca, incluso con menos cantidad de votos en el total general.