Juan Manzur afirma que las elecciones quedaron en el pasado, que hay que mirar adelante. Habla de un Tucumán productivo que está despegando y que volverá a ser el centro de la región. Cita diálogos textuales con el presidente, Mauricio Macri, para dar cuenta de la buena relación que asegura mantener con la Nación. Jura por sus hijos que no tuvo hasta ahora ni una diferencia con su vice Osvaldo Jaldo. A un año de asumir, el gobernador y el vicegobernador recibieron a LA GACETA en la Casa de Gobierno. Durante una hora, efectuaron balances de lo que pasó y proyecciones para lo que vendrá.

“Tenemos que trabajar en reglas de juego claras y en que el empresariado pueda llegar a nosotros y forme parte de este proceso para que a Tucumán le vaya mejor. Hay algunos temas centrales en los que trabajar: la conectividad, la competitividad, la rentabilidad de las empresas y el abrir nuevos mercados. A esto no podemos llevarlo adelante solos, sino junto a la Nación. Hay que juntarnos; si no, nos llevarán puestos”, resumió Manzur como un primer esbozo.

-¿Qué balance hace de este año?

-Hacemos lo que dijimos que haríamos. No nos hemos salido de la ruta. El Presidente tuvo una deferencia en la primera reunión en Olivos con los gobernadores. Me dijo: ‘Juan, ¿cómo está Tucumán?’. Le dije: ‘Bien, Mauricio. Lo único es que si me podés dar una mano con el 2% de incremento del etanol. Me dijo ‘sí, te lo voy a dar’. Lo pongo como ejemplo porque así es la búsqueda que tuvimos con la Nación para complementarnos y generar más productividad. Para la conectividad era clave una obra: el aeropuerto. Cuando se terminen las obras, me puedo sentar, como me senté con la gente de Latam para pedir conectividad.

- Comenzaron el Gobierno después de elecciones convulsionadas ¿Pudieron dejar atrás eso?

-Tuvimos un apoyo masivo, ganamos por más de 100.000 votos. Tuvimos cuatro elecciones y a todas las ganamos. No es nuestro estilo permanecer en el pasado, sino proponer para adelante.

-¿La apuesta es hacer política con la gestión?

-Tenemos que apuntar a privilegiar la gestión, es clave. Cuando viajo a Buenos Aires, hablo más con Osvaldo que cuando estoy aquí. Porque no existe la gente suelta. Si hay algo que uno no puede ser en política es soberbio. Por eso pedimos ayuda.

- ¿Cumplió con los desafíos fijados para el año de gestión?

-Lo primero que quería era ver era un estado en funcionamiento, que cumpla con sus obligaciones. Estamos viendo los últimos números porque vamos a presentar un Presupuesto que no tiene déficit. Habla a las claras de tener previsibilidad. Pero falta, hay mucha gente sin trabajo.

- ¿Qué se prioriza en un presupuesto en el que el 52% es para sueldos?

-Creo que la paz social y el incentivar la producción. Tucumán va a despegar. Lo que hace falta es lo que dijo la gente cuando salimos preguntarle sobre cuál debía ser el lema del Bicentenario: “juntarnos”.

-Si tuviera que agradecer por estar aquí, ¿a quién sería?

- A los tucumanos. Nos debemos a ellos. Quiero que a la Argentina y al Presidente les vaya bien.

-¿Cómo analiza el estallido del problema de la droga y lo que sucedió con el padre Juan Viroche?

-Con mucha preocupación. Son problemáticas de escala que superan la capacidad de respuesta de una jurisdicción. Son problemas globales estos tipos que trafican muerte. Todo lo que esté a nuestro alcance lo vamos a hacer. Agradecí en diferentes oportunidades esta dependencia de la Policía Federal que se instaló y el destacamento de Gendarmería en Monteros. Hay muchos sacerdotes a los que hay que ayudar, que están planteando una lucha frontal contra el flagelo. Son católicos valientes y de otras confesiones. Es una situación triste y difícil. Siempre dejamos todo en manos de la Justicia. Ayudaremos para que se sepa la verdad.

-El intendente Germán Alfaro dijo que en la gestión anterior se dejó avanzar el narcotráfico…

-Son declaraciones desafortunadas. Fue secretario de Gobierno del intendente Amaya y en 10 años no dijo nada. Son cuestiones en las que hay que tener prudencia. A veces se hacen aseveraciones que no tienen sustento. ¿Justo ahora lo dijo? En 12 años manejaba todo y no dijo nada.

-¿Qué políticas de la Nación no beneficiaron a la provincia?

-Hubo cambios en la estructura de los ministerios y eso llevó a un rediseño de lo que tiene que ver con la obra pública. Estamos esperanzados en que se reactiven. Este cambio hizo que disminuya la inversión en un sector dinamizador de la economía.

-En su asunción habló de transparentar el Estado y de mejorar el sistema de estadísticas ¿Cómo marcha eso?

-Hubo avances mediante las herramientas informáticas que hace que el estado se vaya modernizando. Hay que destacar que Tucumán tiene un organismo de contralor de muchísimo prestigio (por el Tribunal de Cuentas). Todo lo que sea en beneficio de la transparencia y de generar mayor calidad lo iremos haciendo. Tucumán siempre tuvo estadísticas confiables, hay un equipo técnico que conduce Julio Saguir que siguió funcionando en momentos difíciles. Hacen una provincia confiable.

-¿Se pagará el bono de fin de año?

-Si hay una situación extraodinaria en la que la Nación se compromete con los gremios a dar un bono, tendrán que ayudar a las provincias.

-¿Le preocupa el clima social en diciembre?

-Por supuesto. Hay que tener serenidad, a veces se exacerban los ánimos. Hay que estar muy cerca de la gente y ver de generar respuestas.

-¿Qué imagen le gustaría tener como gobernador?

-Soy modesto. Quiero que tanto a Osvaldo como a mí nos recuerden como quienes tratamos de cumplir con lo que dijimos que haríamos. No esperen de nosotros grandilocuencia, creo en la planificación y el día a día.