Con bronca pero nada disconforme. Marcando errores en su equipo pero destacando las virtudes hasta el hartazgo. Respetuoso del arbitraje pero asegurando que sus errores influyeron directamente en el resultado. Un Juan Manuel Azconzábal muy amplio para vertir sus conceptos, encaró el enjambre de periodistas que lo esperaban al término del partido.
“Disconforme no. Buscamos la victoria desde el primer minuto y levantamos dos veces el resultado. Sí estoy con bronca por los dos goles que nos hacen”, arrancó contestando el entrenador mostrando ya desde el comienzo que sus sensaciones no eran de un solo color.
No se cansó de decir que la causa de esa bronca, los dos goles de Boca tempraneros en cada tiempo, es motivo de preocupación pero nunca puso un punto y aparte a ese razonamiento sino que lo empalmó con los halagos. “No me gusta para nada que nos hagan goles así pero el equipo hizo un esfuerzo bárbaro, jugó bien y levantó el resultado dos veces ante un rival de fuste”, explicó.
El tema al que asoció toda pregunta fueron los errores de los árbitros asistentes Alejandro Mazza y Sergio Zoratti (convalidados por árbitro principal Diego Abal) que anularon erróneamente los goles a Luis Rodríguez y Fernando Zampedri. “Yo soy muy respetuoso del trabajo de los demás (por los árbitros) pero el resultado del partido hubiese sido otro si las decisiones arbitrales no hubiesen sido tan erróneas”, dijo Azconzábal sin hacer referencias directas para ninguno de la terna.
“El equipo se mostró en mejor forma que su rival, fuimos superiores. Repito, los dos goles que nos meten es para corregir y nos puede pasar ante equipos de esta clase pero el saldo es positivo. Las situaciones se crearon”, repitió. “No tuvimos la fortuna de que las decisiones arbitrales sean acertadas”, agregó.
Por supuesto que hubo tiempo para volver a la carga con la posible clasificación a la Copa Libertadores. “Demostramos porque hicimos mérito para clasificar a la Copa. Pase lo que pase este equipo va a ser el primer tucumano en clasificar a un torneo internacional (en el peor de los casos será la Sudamericana) pero merecemos estar en la Libertadores”, se descargó.
Cuando fue consultado sobre el público y el marco que le puso al partido, el director técnico no dudó: “Fue tremendo lo de la gente. Por suerte desde hace dos años le venimos dando satisfacciones y se ha creado una simbiosis muy buena entre ellos y nosotros”.
Por último, un periodista, sobre el final de la rueda, le sacó la declaración más obvia pero quizás, la más contundente. “¿Qué faltó para que ganara Atlético?”, consultó. “Que nos cobraran uno de los dos goles”, respondió con una sonrisa, la primera del encuentro con los medios.