Los gremios de la provincia se sumaron al reclamo por un bono de fin de año. La delegación Tucumán de la Confederación General del Trabajo (CGT) requirió a las empresas locales y al Gobierno provincial el pago en dos partes de un extra de $ 5.000. El pedido del sector está en línea con lo que se evalúa en la central obrera nacional.
“Estamos totalmente de acuerdo con el reclamo del bono, pero no con el monto que se ha fijado –por los $ 1.000 o $ 2.000, propuestos por algunas entidades privadas y la Nación-. En nuestro gremio pedimos que el pago del bono tiene que ser desdoblado: $ 2.500 antes de fin de año y $ 2.500 en enero, período de mayor gasto y compromisos de las familias. La gente se queda sin dinero en ese momento”, enfatizó Osvaldo Acosta, titular de la CGT Tucumán.
El dirigente cuestionó la posición de los empresarios locales, quienes habían cuestionado días atrás la implementación de un bono salarial. “Los empresarios tucumanos sólo piensan en sus bolsillos. Cuando se habla de una recomposición para los trabajados, se ocupan sólo en generar confusión y no plantean soluciones”, apuntó. “Inclusive, cualquier incremento salarial que se aplica, automáticamente trasladan a los precios”, añadió ante la consulta de LA GACETA.
El referente de la CGT dirigió el reclamo al Poder Ejecutivo provincial, al calificar de “migaja” los $ 750 otorgados como compensación. “El Gobierno debe considerar que con ese monto, uno no está en condiciones afrontar los efectos de la inflación. El Gobierno de la provincia tiene que considerar que esa cifra es ínfima”, remarcó.
“Como secretario general del sindicato de empleados municipales, el mensaje también es para el intendente de la capital. De una vez por todas, Germán Alfaro debe hacer su aporte salarial y no estar sujeto al Ejecutivo provincial”, agregó.