BUENOS AIRES.- La economía argentina mantiene la proyección de un repunte del crecimiento en torno del 3,2% en 2017, impulsado por la inversión pública y privada, a pesar de que la caída prevista para el corriente año se profundizó del -0,4 al -1%, según un informe del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA). El reporte prevé que América Latina vivirá este año el fin de la desaceleración económica que comenzó en 2012, con una caída de la actividad promedio de 0,9%, y comenzará una recuperación gradual en 2017, con una suba del PBI del 1,8%.

En ese contexto de reversión de la situación regional, el informe asegura que “en 2017 serán Perú, Argentina, Colombia y Paraguay los países que más crecerán en América Latina”. “El aumento de la actividad estará apoyado en un incremento de la inversión, tanto pública como privada, especialmente en Argentina, Perú y Colombia, así como en un mayor dinamismo del sector externo”, resaltó el documento.

En el caso argentino, el BBVA revisó a la baja el crecimiento en 2016, del -0.4% al -1.0%, por el “efecto de la revisión de las series históricas del PBI, así como por una mayor contracción de la actividad en el primer semestre de este año”. Esta contracción es atribuida por la entidad financiera al aumento de la inflación y al necesario tono contractivo de la política monetaria, a pesar de lo cual siguen “anticipando un repunte del crecimiento del 3,2% en 2017, impulsado por la inversión”. A pesar de la perspectiva favorable, el BBVA advirtió que “la incipiente recuperación de las confianzas en algunos países como Argentina, Brasil, Perú o Colombia también se puede truncar si no se afianza la recuperación en ciernes”. “Esto, junto con la debilidad de los mercados laborales, corre el riesgo de debilitar aún más el consumo y la inversión en los países de la región”, agregó.

No obstante, planteó que “parte de la recuperación del crecimiento en algunos países en 2017 dependerá de la consecución de los planes de inversión pública, por lo que retrasos adicionales en esos planes también representan un riesgo de alto impacto”. (Télam)