BUENOS AIRES.- El juez Daniel Rafecas rechazó ayer un pedido de la DAIA para que se reabra la investigación por la denuncia presentada por el fallecido fiscal Alberto Nisman contra la ex presidenta Cristina Fernández y otros funcionarios K por encubrimiento a los iraníes acusados de volar la mutual judía, que él mismo había cerrado en febrero de 2015. Posteriormente se conoció que el juez Claudio Bonadio le pidió la causa a Rafecas para seguir con la investigación, según informó el sitio Infobae.com.
Rafecas sostuvo que “las dos cuestiones que aquí viene a presentar la DAIA en su escrito, lejos de cambiar el parecer del suscripto en este asunto, lo refuerzan, pues en definitiva revelan una ausencia de reales elementos de prueba que vengan a poner en tela de juicio las afirmaciones antes desarrolladas”. Se trata de la conversación que mantuvieron el ex canciller Héctor Timerman y el dirigente comunitario Guillermo Borger, y del planteo en torno sobre que la consultoría jurídica de la Cancillería no había sido consultada para participar de la confección del Memorándum con Irán, tendiente a esclarecer el ataque que dejó 85 muertos.
Con los mismos argumentos, la DAIA también se presentó en el juzgado de Bonadio, junto a familiares de las víctimas de AMIA. Allí se investiga una denuncia de “traición a la patria” contra la ex mandataria, Timerman y los legisladores que votaron el Memorándum. En ese expediente el fiscal Eduardo Taiano pidió reabrir la denuncia contra Cristina que formuló Nisman cuatro días antes de aparecer muerto de un balazo en la cabeza en el baño de su departamento en Puerto Madero.
Ayer, Rafecas insistió en desestimar la reapertura de la denuncia impulsada por el fiscal Gerardo Pollicita tras la muerte del titular de la UFI-AMIA y afirmó que otras dos instancias superiores, las cámaras Federal y de Casación, ratificaron el cierre del caso.
Al analizar el pedido de la DAIA, Rafecas afirmó que de “la conversación telefónica entre el ex Canciller y el dirigente comunitario, lo único relevante a los efectos de esta causa es que el primero le atribuye a Irán la responsabilidad de haber colocado el explosivo en la AMIA en 1994, esto es, una afirmación, en términos coloquiales, de la postura que la Argentina sostiene oficial y públicamente” desde 2006.
Y añadió que “francamente entonces, no se advierte en qué esta conversación puede poner en jaque el sólido edificio fáctico y jurídico, que se evidencia en esta causa, consolidado en las tres instancias penales”. (DyN)