Hubo que esperar. ¡Y cuánto! Tal como lo indicaba el pronóstico, la lluvia mojó temprano a la bella Pésaro, lugar de los hechos para la serie de Copa Davis entre Italia y Argentina. Y, también de acuerdo a lo que sugería el pronóstico, en este caso tenístico, en el primer saldo del viernes Argentina sacó ventaja. Federico Delbonis derrotó a Andreas Seppi por 7-6, 3-6, 6-3 y 7-6 en un partido largo (3h 38’), intenso, desgastante desde lo físico y con tablero inestable.
A excepción del segundo set, el bonaerense siempre miró los números de adelante, como consecuencia de una mayor capacidad para mover la pelota pesada en superficie muy húmeda y la decisión a sostener la iniciativa. Incluso, en varios momentos, Federico pareció apurado por establecer un desarrollo de palo y palo en el que podía ganar o perder, pero en el que seguramente la mayoría de las decisiones las tomaría él. Cuando aflojó la intensidad, cedió terreno y, consecuencia instantánea, terminó sometido a correr lado y lado bien por detrás de la línea de fondo, algo desaconsejado para sus características físicas.
Fueron muchas las situaciones en las que el azuleño desperdiciaba una ventaja para recuperarla casi de inmediato. Y, si eso no ocurría, el cierre llegaba en el tie-break, tal como en el primer set y, en el cuarto, para sellar la victoria. “Fue un partido muy mental, con ciertas distracciones que pude sacar adelante. Es clave quedar 1-0 en el marcador”, resumió el número 40 del ranking mundial.
Sin dudas es clave, para Argentina, para Juan Mónaco. El tandilense jugará contra Fabio Fognini (desde las 6, por TyC Sports) el single postergado por falta de luz. Y luego la vuelta de Juan Martín Del Potro, en tándem con Guido Pella, (ante Marco Cecchinato y Paolo Lorenzi) será un hecho en sí mismo, independientemente de lo que pase con él en la cancha. Por uno y otro partido, la agenda queda inevitablemente apretada, condición que favorece a Argentina, en desmedro de Italia, por eso de que cuenta, de verdad, con cuatro jugadores. Es cierto que todavía falta mucho. Tanto como que las primeras noticias que dejó la serie no podrían haber sido mejores.